Jorge Triaca parece no estar dispuesto a dejar de apostar fuerte en las intervenciones gremiales, ni una vez que se haya confirmado su salida del Gobierno. Luego de los escándalos de corrupción en cada una de las organizaciones en las que tuvo injerencia, ahora el exministro teje un plan con Luis Barrionuevo para intentar quedarse con el gremio de seguridad, UPSRA.
A pesar de que el plazo estipulado por la Junta Electoral para la presentación de listas venció hace 13 días y sólo la nómina que comanda Julio Gutierrez presentó los requerimientos en tiempo y forma, el funcionario saliente y el gastronómico presionan para validar la suya, incompleta y con candidatos que no cumplen con los requisitos legales.
A través del influyente abogado de confianza de Barrionuevo para estos menesteres, Horacio Ferro, y el residual de la gestión de Triaca, el tándem diseña artilugios para que sus «candidatos» puedan estar presentes en los comicios que tienen fecha el próximo 14 de enero.
La estrategia ya tomó estado público en los pasillos de la cartera de Producción y Trabajo y son varios los conocedores del paño que apuntan a que se estaría cocinando a espaldas del Ministro.
«Nosotros lo que pedimos es que el ministro Sica ponga un veedor, alguien de su confianza que constate lo que está ocurriendo. Es el único caso en la historia del sindicalismo en el que pasaron 13 días del vencimiento de presentación de listas y la junta no se expidió», le explicó Gutierrez a InfoGremiales.
Es que la maniobra que están gestando va a estallar de lleno en la cara de Sica cuando salga a la luz lo ocurrido y el actual Secretario de Trabajo ya no esté en funciones. «Es un escándalo» repite Gutierrez que, adicionalmente, teme que Ferro consiga su segundo objetivo: «Colocar a alguien cercano a Triaca a la cabeza de la Junta para que sólo quede en carrera la lista de Barrionuevo».
Lo curioso es que el pacto del exministro y «Bandeja» se plasmó al calor del video en el que la gente del gastronómico grabó a la del funcionario contando y repartiéndose dinero del gremio en cuestión. Esa filmación, que selló la suerte de Patricio Castro, parece haber ligado en sus planes a quienes hoy presentan a Leónidas Riquelme como delfín y salvavidas para lo actuado por el entorno de Triaca en la organización en estos años.