La seccional Córdoba de la UTA pasa momentos desconcertantes. La conducción nacional de la Unión Tranviarios Automotor (UTA) resolvió la “destitución” del titular de la filial en Córdoba, Ricardo Salerno, por haber resuelto un paro del transporte público urbano de pasajeros en la capital cordobesa.
La medida de fuerza era en rechazo a la decisión de la empresa de trasladar una de las puntas de líneas a un sector que, según los choferes y avalados en ese entonces por la UTA local, queda a trasmano y lejos y que no cuenta con las condiciones de seguridad.
Ahora, el interventor del germio, Luis Arcando, tras el anuncio de la empresa de transporte Ersa sobre el despido de 20 o 25 empleados que participaron el miércoles de una asamblea que paralizó los recorridos de las líneas 70 y 74, confirmó que el gremio defenderá los puestos de trabajo de «algunos» choferes.
Arcando ratificó a Radio Universidad que el gremio no avaló las medidas, tal como lo había señalado más temprano la vocera de la firma, Ana Julia Capuccino, y el propio ministro de Trabajo, Omar Sereno.
El delegados de la conducción central especificó que uno de 15 delegados que tienen los trabajadores de la empresa se «descolgó solo a realizar una asamblea» sin siquiera poner en conocimiento al sindicato sobre los motivos de la medida.
Pese a no acompañar el reclamo, Arcando adelantó que defenderán los puestos de trabajo «de alguno» de los trabajadores que «fueron llevados a realizar dicha maniobra» y que fueron «confundidos» para poder desarrollar la protesta.