Desde 2016, la firma dedicada a la producción de calzados despidió a más de la mitad de sus ochenta empleados. Las últimas desvinculaciones, según precisaron, se llevaron adelante “inventando causas para no pagar las indemnizaciones”.
“Nos mandaron telegrama inventando causas y no tuvimos chances, hicieron dos escraches y no hay respuesta de ellos, no hay diálogo”, relató en diálogo con el progama radial El Termómetro Jorge Fernández, uno de los afectados por la decisión, quien indicó que la medida tiene que ver con que la empresa importa productos de China y Brasil.
En ese sentido, el hombre mencionó que “amenazaron con despedir a nueve más” si no se atienen al plan de trabajo según el cual deberían ir sólo tres días. “Quieren cambiar la mano de obra por importaciones”, observó.
En tanto, si bien recurrieron al Ministerio de Trabajo y hubo una reunión de conciliación obligatoria, no tuvieron respuestas favorables, así como tampoco por parte de la Unión Trabajadores de la Industria del Calzado (UTICRA).
“Nos dijeron que no pueden hacer nada más, que ya no nos pueden acompañar y estamos haciendo por nuestra cuenta. Los que nos tendrían que estar representando no lo están haciendo”, aseveró y mencionó que harán una presentación a través del Concejo Deliberante.