Los jefes de ATE bonaerense, Oscar De Isasi, y de ATE Ensenada, Francisco Banegas, se negaron a prestar declaración indagatoria y pidieron la nulidad de la causa en la que se los procesó por la ocupación del Ministerio de Economía provincial durante una protesta de los trabajadores del Astillero Río Santiago.
Los gremialistas se presentaron ayer ante el fiscal penal de La Plata, Marcelo Romero, quien los acusó por «coacción agravada por la calidad de miembros de los poderes públicos del sujeto pasivo en calidad de tentativa, incitación a la violencia colectiva y atentado contra la autoridad en concurso real».
Acompañados por el abogado Marcelo Ponce Nuñez, los dirigentes de ATE presentaron un escrito en el que pidieron la nulidad de la causa, radicaron un habeas corpus para evitar su posible detención y recusaron al fiscal Romero, señaló una fuente judicial.
El informante explicó que en el escrito, el abogado defensor planteó que los dirigentes «no rompieron el portón de ingreso al Ministerio ni estaban en el lugar en ese momento tal como indica la fiscalía».
En la acusación, Romero consideró que «existen elementos suficientes e indicios vehementes de que entre las 11 horas, aproximadamente del día 18 de septiembre de 2018 y las primeras horas del 19, por lo menos dos personas de sexo masculino, en su calidad de secretario general de la Seccional de Ensenada y secretario general de la provincia de Buenos Aires de la Asociación de Trabajadores del Estado (ATE), abusando de los atributos que la representación conferida por las bases les otorgaron, intentaron coaccionar al ministro de Economía bonaerense, Hernán Lacunza».
Tras presentarse en los Tribunales platenses, De Isasi explicó que «defendemos los intereses de los trabajadores y trabajadoras, mano de obra calificada. Y defendemos el Astillero Río Santiago que puede ahorrarle recursos a la provincia».