El Frente Gremial Docente, que reúne a la mayoría de los maestros y profesores bonaerenses, anunció ayer que realizará un paro por 48 horas el próximo lunes y martes, en coincidencia con el reinicio de las clases tras el receso invernal. La medida es para reclamar un nuevo ajuste salarial ante el «incremento en los índices inflacionarios».
Este dolor de cabeza que dejará a los chicos sin clases, le dará un nuevo golpe al gobernador Daniel Scioli en su carrera presidencial. A los paros de estatales y de profesionales de la salud, se le suma ahora la huelga de maestros que pone en jaque la figura de uno de los principales competidores por la presidencia en 2015.
A través de un comunicado, los docentes que integran los sindicatos mayoritarios de la Provincia de Buenos Aires AMET, FEB, SUTEBA y UDA denunciaron el incumplimiento del acuerdo paritario y la falta de convocatoria de la gobernación para realizar «un monitoreo de los índices del costo de vida y la evolución de los precios durante los meses transcurridos desde marzo del corriente año».
«Durante el período mencionado, no sólo no se ha producido una desaceleración de los precios -tal como fuera anunciado por los representantes del Estado- sino que hubo un incremento en los índices inflacionarios, derivando en una nueva y constante pérdida del valor adquisitivo del salario», plantearon en el escrito.
Los maestros denunciaron el resto de los puntos que quedaron pendientes tras el aumento salarial rubricado a principios de año, como la garantía de un Servicio Alimentario Escolar (SAE) en calidad y cantidad, la reposición del fondo escuela para gastos menores, mejoras en infraestructura y transporte escolar, la creación del cargo de preceptor de primaria, entre otros.
«Exigimos que se convoque a la brevedad una nueva mesa negociadora de contenido salarial», reclamaron los docentes.
La titular de la Federación de Educadores Bonaerenses (FEB), Mirtha Petroccini aclaró que la aceptación del aumento anual «estaba condicionada a la revisión» del acuerdo paritario en caso de que la inflación se erosionarse los incrementos.
«Esta fue la condición de la aceptación en aquella oportunidad. Exigimos obtener un recupero del poder adquisitivo. El resto de los reclamos tiene que ver con una integralidad del mejoramiento del sistema educativo provincial», planteó en radio Mitre la dirigente gremial.
De efectivizarse, las huelgas programadas para el próximo 4 y 5 de agosto reinstalan el conflicto docente en la Provincia de Buenos Aires. Durante el inicio del ciclo lectivo de este año, la pelea de los maestros puso en jaque al gobierno de Daniel Scioli con un paro que se extendió por 17 días.
Los educadores de las escuelas privadas nucleados en el SADOP no se pronunciaron a favor de la medida de fuerza.
Por su parte, desde el gremio moyanista UDOCBA adelantaron que la decisión podría ser lanzar un paro en la misma fecha pero por 72 horas subiendo la apuesta. Los maestros moyanistas en todo momento se opusieron al acuerdo salarial con el gobierno de Scioli y ahora aprovecharán para hacer recrudecer sus reclamos.