Todos los sindicatos acordaron en que la propuesta del gobierno nacional es aceptable, aunque aún no fue aceptada en el momento, marcando una clara diferencia con las ofertas de provincia y ciudad de Buenos Aires.
Ayer propusieron una suba de 28% para febrero, equivalente a $7.800, y en junio la suba llegaría al 40, con $8.500, mejorando la oferta de aumento del 28,7 por ciento del día anterior tras un cuarto intermedio.
Además, el Ministro Esteban Bullrich una anunció una «cláusula específica que establece que nunca más (el salario mínimo docente) va estar debajo de, al menos, el 20 por ciento (más) del mínimo vital y móvil»; y una suba de 300 pesos más a partir de febrero con lo que el fondo de incentivo docente irá a $810 y en junio pasará a 1.010.
Al salir de la reunión, el representante de Unión de docentes Argentinos (UDA), Sergio Romero, se mostró cauto: «mañana vamos a firmar un acta, no es aceptación». Y explicó: «Vamos a analizar la propuesta y después se lo comunicaremos al ministro». «En términos porcentuales (la suba) parece importante, pero en el bolsillo de los docentes sigue siendo poca plata», apuntó Romero. «Los docentes tenemos que seguir trabajando para mejorar el salario», remató.
Por su parte, Sonia Alesso de Ctera afirmó: «Estamos cerca de lo que nosotros veníamos planteando».
El representante de Suteba, Roberto Baradel señaló de cara a lo que viene: «Le hemos planeado al ministro que discuta con cada provincia, esperamos que mañana se empiecen a destrabar en cada jurisdicción y donde no comenzaron las paritarias, que comiencen».