El subsecretario de Políticas Universitarias llamó a los gremios docentes a una reunión de urgencia y ofreció una «equiparación» con el resto de los empleados estatales. Sin embargo, los sindicatos declinaron la propuesta a pocos días de una nueva marcha universitaria. El Gobierno acusa a los manifestantes de radicales.
Este jueves, el Gobierno sorprendió al convocar a los gremios docentes universitarios a una reunión paritaria. Durante el encuentro, se ofreció equiparar los salarios de los docentes con los empleados estatales del Sistema Nacional de Empleo Público (Sinep), en un contexto tenso marcado por el inminente veto a la ley de financiamiento universitario.
El subsecretario de Políticas Universitarias, Alejandro Álvarez, se reunió con representantes de la Federación Nacional de Docentes Universitarios (Conadu) a pesar de la huelga de 48 horas que ya habían iniciado los gremios. La marcha universitaria, convocada para el 2 de octubre, se suma a esta movilización. Mientras tanto, el Gobierno tiene hasta el 3 de octubre para oficializar el veto a la ley, y se especula que podría hacerlo justo después de la marcha.
Durante la reunión también estuvieron presentes dos representantes del Consejo Interuniversitario Nacional (CIN) en calidad de «veedores». Sin embargo, desde el Gobierno critican este rol, argumentando que los rectores, como empleadores formales, deberían tener un papel más activo en las negociaciones.
El Gobierno ofreció un aumento del 6,8% para octubre, que incluye un 1% de incremento salarial mensual y un 5,8% de recomposición. No obstante, la Conadu rechazó la propuesta argumentando que los docentes universitarios siguen con una significativa pérdida de poder adquisitivo en comparación con otros empleados estatales.
Desde diciembre del año pasado, los salarios universitarios han sufrido una disminución del 75% en su poder adquisitivo, según la Conadu. Además, los docentes vienen advirtiendo que, mientras la inflación alcanzó un 154% entre noviembre y julio, sus salarios solo subieron un 58,2%, muy por debajo del aumento que tuvieron otros sectores del Estado.
Carlos de Feo, Secretario General de CONADU, la federación mayoritaria de Argentina, señaló: «A nadie escapa que esta convocatoria se da por la inminencia de una marcha masiva en rechazo al ajuste en la universidad. La propuesta en sí está muy lejos de equiparar con los estatales porque es solo un 5.8 para octubre y no reconoce la enorme deuda de más de 50 puntos nominales en el salario de docentes y no docentes. Tampoco resuelve la cuestión de la garantía salarial, FONID y otros temas».
«Justamente por todo eso es que apoyamos la ley de financiamiento universitario, que resuelve todo lo que él gobierno no quiere resolver y por eso Milei la quiere vetar», agregó.
En efecto, la ministra de Capital Humano Sandra Pettovello, publicó en la red social X: “A mí nadie me pidió que interceda. El veto es total”.