El proyecto de presupuesto que Horacio Rodríguez Larreta envió a la legislatura porteña para ser aprobado dejó una serie de cuestiones claras: la primera de ellas es que se proyecta un nuevo ajuste sobre los empleados públicos de la Ciudad Autónoma de Buenos Aires.
La noticia cae como una bomba que suma presión en el inflamable gremio de municipales porteños, SUTECBA, desde hace meses envuelto en una mediática disputa entre el oficialismo y la oposición, que aspira a desbancar de la secretaría General al eterno Amadeo Genta.
El último entendimiento paritario ya había generado revuelo e incluso un cruce a través de los medios. La oposición, referenciada con Carlos Elías, rechazó el 15% en cuotas y no remunerativo que firmó el oficialismo.
Los de Elías más tarde fueron a la OIT para denunciar que Genta incumplía el cupo femenino en la comisión directiva del gremio.
Como sea, las diferencias internas deberán saldarse en los comicios de renovación de autoridades que, coronavirus mediante, tendrán su ida a las urnas en 2021. Allí el ajuste de Larreta puede generar un problema adicional para Genta que buscará revalidar sus credenciales en un contexto de ajuste. Algo siempre complejo.
Aunque todavía no hay certezas sobre si será el propio Amadeo quien encabece la lista del oficialismo, ya empezaron a sonar potenciales sucesores por la edad avanzada del cacique gremial. Entre ellos su hijo Emiliano, hombre que ya es parte de la conducción y que este año tuvo una serie de reuniones de alto voltaje sindical, entre ellas una con Pablo Moyano que hizo mucho ruido.