En un comunicado difundido por el secretario general de La Bancaria, Sergio Palazzo, la organización sindical expresó su profunda preocupación por el anuncio del cierre de nueve sucursales del Banco Nación en la provincia de La Pampa. El problema radica en el recorte de fondos de Nación a las provincias, que forzó al gobernador a una suba del impuesto al crédito y el Banco Nación respondió cerrando sucursales. El gremio llevará el conflicto a la Secretaría de Trabajo de la Nación.
El gremio desde su Secretariado Nacional afirmó que «nunca es el camino el cierre de sucursales», especialmente considerando que la medida es una reacción a un aumento transitorio del impuesto a los créditos impulsado por el Gobierno Provincial, cuya alícuota del Impuesto a los Ingresos Brutos subió al 15,5%.
Palazzo subrayó que el aumento del impuesto está programado para finalizar en diciembre de 2024 y que el gobernador se ha comprometido a no renovar dicha medida. «Existe la palabra del Gobernador de no renovar dicho tributo», destacó el secretario general, argumentando que este hecho debería haber sido suficiente para evitar la decisión del Banco Nación de cerrar sucursales en la región.
El dirigente también expresó su desacuerdo con la suba indiscriminada de impuestos, pero resaltó que esta situación es producto de los recortes de fondos del gobierno de Milei. «La suba atenta contra el mercado de crédito, indispensable para acompañar y fomentar el desarrollo de los sectores productivos de la economía nacional», afirmó, destacando la importancia del crédito en el impulso a la economía.
Además, Palazzo hizo hincapié en el papel crucial que desempeña el Banco Nación como entidad pública. «La presencia del Banco Nación es indispensable a lo largo y ancho del territorio nacional más allá de la rentabilidad de turno», aseguró y reclamó: «Es hora que las autoridades del Banco entiendan de una vez qué tipo de entidad están administrando y honren tanto su función como a la Carta Orgánica de la Institución».
Finalmente, Palazzo anunció que el sindicato formalizará una denuncia ante la Secretaría de Trabajo para exigir una audiencia urgente y declaró que La Bancaria se encuentra en «estado de alerta y movilización en defensa de los puestos de trabajo». El sindicato alertó que no permitirá que estas medidas afecten los derechos de los trabajadores y la prestación de servicios esenciales a la población.