Se viven días más que intensos en el Sindicato de Obreros Marítimos Unidos (SOMU). Es que en el marco de una renovación de autoridades que aparece sumamente conflictiva, las denuncias contra su secretario general, Omar «Caballo» se multiplican y parecen acorralarlo.
En esta oportunidad cuatro de los siete miembros del secretariado nacional del SOMU denunciaron ante el ministro de Trabajo, Carlos Tomada, «serias irregularidades y violaciones del Estatuto gremial y la Ley sindical» por parte de Suarez.
Haciendo caso omiso a las advertencias que la Justicia laboral realizó, en la jornada de ayer Suarez encabezó una reunión de Consejo que no cumplía con los requisitos estatutarios del gremio. Desde el sector opositor, que comanda el actual secretario de Relaciones Laboralse Jorge Vargas, avanzaron en una impugnación de ese Consejo por falta de legalidad.
Días atrás se conoció que el 30 de este mes Omar Suarez deberá declarar en los tribunales de Comodoro Py a causa de una denuncia por extorsiones a empresas. Además, la semana pasada se sumaron al prontuario de «El Caballo» las denuncias por violaciones del derecho gremial, proscripcion ilegitima de dirigentes nacionales y decisiones unilaterales y arbitrarias en contra del estatuto social de sindicato.
«Caballo» Suarez es conocido por sus métodos violentos y su ambición desmedida. Solía decir: «todo lo que se mueve en el mar es mio» y así aumentó su poder sindical en los últimos años.
Suarez también es sospechado por fraude y desviación de fondos del gremio para la compra de 56 hectáreas a su hija. Además, se le endilgan proyectos personales con empresas y fundaciones encargadas de desviar y lavar dinero de las arcas del SOMU.
La suerte de Omar «Caballo» Suarez parece cada vez más complicada ante la justicia. Mientras tanto tendrá que disputar las elecciones del gremio en una elección que amenaza con tener varios capítulos.