«A diferencia de mediciones anteriores, el desempleo supera actualmente a la inseguridad como principal preocupación de los bonaerenses: un 32,3% la considera ‘la principal problemática de la Provincia’, contra un 29,5% que elige la inseguridad», resaltó el estudio de Analogías.
Las preocupaciones por la corrupción y la inflación se ubican en tercer y cuarto lugar, con 11,5% y 10,2% de las respuestas. Lejos, le siguen las problemáticas por la educación, el narcotráfico, la salud y la falta de vivienda.
El temor a perder el trabajo es un miedo fundado en estadísticas oficiales. Según datos de la Seguridad Social que elabora la mensualmente la AFIP, entre diciembre 2015 y marzo de 2017 se cerraron 3.198 empresas en todo el país, la mayoría pymes de menos de 1.000 empleados.
Las Estadísticas de Registros Laborales publicadas por el INDEC en abril pasado informaron que durante el último trimestre del 2016 el mercado ofreció 68.314 puestos menos que en el mismo período de 2015, registrando una baja del 1%. Para el Instituto el número de empresas registradas que bajaron sus persianas totalizó 4.462 en un año. Los sectores más golpeados por la destrucción del empleo son la construcción, la explotación minera y la industria manufacturera.
El INDEC también divulgó días atrás que en la provincia de Buenos Aires la desocupación trepó al 11,3%, por encima del nivel general de desempleo que se ubica en 9,2%. «Se trata de la tasa de desempleo más alta en 10 años. Hay que remontarse al primer trimestre de 2007 para advertir un nivel de desempleo superior al de este año», señaló Analogías en el reporte anterior.
La situación más grave la padecen los jóvenes argentinos: en el primer trimestre del año el 20,1% de las mujeres y el 17,2% de los varones hasta 29 años estaban desocupados. En ese mismo lapso, la tasa de trabajadores «en negro» o no registrados marcó 33,3%.
Es por ello que el estudio de opinión refleja que siete de cada 10 jóvenes bonaerenses creen que la situación económica empeoró desde 2015. «La ecuación se invierte en los mayores de 60 años, donde predominan quienes observan una ‘mejoría'», resaltó.
Al medir las expectativas a «mediano plazo» la realidad vuelve a chocar con los deseos: las opiniones también muestran un sesgo negativo, aunque aumentan levemente las respuestas positivas: 41% de los bonaerenses esperan que la situación económica del país mejore en el próximo año -o que sea igual de buena- contra 53,2% que estiman que empeorará o será «igual de mala».
Según Analogías, nuevamente la edad resulta un determinante importante de las respuestas: un 66% de los mayores de 60 años tienen expectativas positivas. Un 36,9% de los menores de 30 años no tienen esperanzas en el futuro económico de la provincia.