El Gobierno a través de Francos busca bajarle el precio al paro general de la CGT y asevera: «No tiene sentido»

El Gobierno nacional a través del jefe de Gabinete, Guillermo Francos, criticó duramente el paro general convocado por la CGT para el 10 de abril, calificándolo de «ridículo» y asegurando que no cuenta con respaldo social. Sin embargo y en paralelo, busca frenar la medida, la central obrera mantiene su postura y suma movilizaciones en apoyo a los jubilados y en defensa de los derechos laborales.

El jefe de Gabinete, Guillermo Francos, calificó de «ridículos» los motivos del paro general convocado por la Confederación General del Trabajo (CGT) para el próximo 10 de abril. En una entrevista reciente, el funcionario cuestionó la medida de fuerza y minimizó los reclamos de la central obrera, que exige paritarias libres, un aumento de emergencia para los jubilados y la reactivación de la obra pública.

«De nada sirve que nos empecemos a poner en difíciles, sacando de la galera una huelga que nadie esperaba por un hecho que es absolutamente ridículo», afirmó Francos, refiriéndose a la decisión de la CGT de convocar un paro en respuesta a la actuación de las fuerzas de seguridad en recientes manifestaciones. «Que la CGT convoque una huelga porque las fuerzas de seguridad defienden el orden público… No lo puedo entender. Que me digan otra cosa, pero no eso, porque no tiene sentido», agregó.

En relación con el ataque sufrido por el fotógrafo Pablo Grillo, quien permanece internado con pronóstico reservado tras los incidentes, el jefe de Gabinete consideró que fue «un accidente y mala suerte», aunque reconoció que «no fue bueno lo que sucedió».

Asimismo, Francos desestimó que la medida de fuerza cuente con un amplio respaldo popular. «Mi sensación es que no hay acompañamiento social. Un paro de 36 horas… no tiene ninguna lógica», afirmó.

El paro del 10 de abril será el tercero de la CGT contra la gestión de Javier Milei. La medida incluirá una movilización el día previo en apoyo a los jubilados y contará con el respaldo de gremios del transporte, lo que afectará servicios en todo el país.

Mientras tanto, el Gobierno busca contener la protesta convocando a gremialistas dialoguistas a una reunión con la intención de frenar la medida. Sin embargo, la CGT ratificó su postura y anunció que también se movilizará el 1 de mayo por el Día del Trabajador.