El Gobierno parece haber elegido a los Moyano como enemigos predilectos. Ahora habilitó un sindicato alternativo que podrá afiliar a los choferes en la provincia de Jujuy. Hay antecedentes en Santa Fe y Córdoba.
Con los antecedentes de Santa Fe y Córdoba, el Gobierno Nacional habilitó en Jujuy un nuevo sindicato de camioneros que, no casualmente, no estará bajo la órbita de Hugo Moyano y su hijo Pablo. Es una demostración de la decisión libertaria de confrontarlos.
Así lo resolvió la Secretaría de Trabajo a partir de la resolución 385/2024 publicada en el Boletín Oficial. La medida dispuesta por el Gobierno significa un golpe al poder del líder camionero, quien ya no tiene injerencia plena en la actividad en tres provincias.
Ahora el secretario de Trabajo Julio Cordero, determinó la incorporación al registro oficial de asociaciones gremiales al Sindicato de Conductores de Camiones de la provincia de Jujuy, otorgándole la potestad para agrupar a los trabajadores que cumplan funciones bajo relación de dependencia en empresas dedicadas al transporte de cargas generales.
Tendrá zona de actuación en toda la provincia aunque los Moyano confirmaron que apelarán la medida.
El antecedente más reciente es lo que sucedió con la seccional de Santa Fe. Después de una década de gestiones y pulseadas en la Justicia, el Sindicato de Camioneros de Santa Fe logró desafiliarse de la Federación Nacional, la entidad agrupa a todas las seccionales del país y que es liderada por Hugo Moyano desde 1992. Con un fallo, la Corte Suprema de Justicia de la Nación revocó una sentencia de cámara y dejó firme la desafiliación, lo que representa una derrota política y judicial para el jefe camionero.
También hubo una escisión en Córdoba. En ese caso fueron los recolectores de residuos quienes crearon su propio gremio de la mano de Mauricio Saillen. En Jujuy y Tucumán emergieron dos sindicatos de camioneros alternativos con simple inscripción como un desafío y sucedió algo similar en Chaco, donde ya habría tres agrupaciones.