La estrategia gubernamental tendiente a cerrar la mayor cantidad de acuerdos salariales en el marco de las pretensiones oficiales, 15% sin cláusula gatillo, con el fin encorsetar lo que sigue en materia de negociaciones, continuará esta semana y apuestan a la colaboración de los estatales de UPCN, los mercantiles y los lucifuercistas.
La idea del oficialismo es que el sindicalismo «amigo» juegue fuerte, adelante sus cierres y marque un quiebre definitivo con la postura de quienes esta semana se aprestan a marchar contra la política económica de Mauricio Macri.
Según trasncedión, hoy habrá un encuentro entre la dirigencia de la Unión Personal Civil de la Nación (UPCN) y funcionarios, para acordar el cobro del 4,8 por ciento de desfase de la cláusula gatillo 2017 para los estatales, lo que sería el preludio del acuerdo 2018.
El gremio ya inició conversaciones con los funcionarios gubernamentales al respecto y no se descarta que el acuerdo podría zanjarse en tres cuotas mensuales consecutivas de 1,6 por ciento cada una.
UPCN generalmente inicia la discusión salarial a mediados de marzo, pero las fuentes gremiales y oficiales no descartaron que esas negociaciones pueden adelantarse y darle un mimo al ministro de Trabajo.
Los otros dos gremios grandes que se aprestan a acordar lo decidido desde la Rosada son la Federación Argentina de Empleados de Comercio y Servicios (Faecys), que conduce Armando Cavalieri, y la Federación Argentina de Trabajadores de Luz y Fuerza (Fatlyf), liderada por Guillermo Moser; ambas organizaciones pactarían acuerdos en torno de las cifras pretendidas por el Gobierno.
Ffuentes lucifuercistas adelantaron a Telam que tienen previsto hoy un encuentro de secretarios generales de todos los sindicatos del país, con el fin de unificar criterios en la mesa de negociaciones en un momento álgido para Luz y Fuerza, ya que la empresa Edesur abrió un plan retiros voluntarios, lo que ha generado inquietud en los trabajadores.
Hasta el momento han cerrado en acuerdos celebrados en el Ministerio de Trabajo los Aceiteros de San Lorenzo, el Sindicato de Remiseros, los tintoreros, el Sindicato Gran Buenos Aires de Trabajadores de Obras Sanitarias (Sgbatos) y los municipales porteños, aunque con una controversia a saldarse en este último caso.