«Si los trabajadores para recuperar su poder adquisitivo tienen que andar peregrinando para conseguir un bono de 2 mil pesos que, después, termina no cobrándolo la mayoría, y al sector empresario graciosamente le permiten aumentar hasta un 148 por ciento servicios como la electricidad, el diálogo no estaría siendo equitativo», señaló Sergio Palazzo en declaraciones formuladas a radio La Red.
De hecho, entendió que, en este escenario, «se empiezan a cerrar muchos de los caminos del denominado diálogo social» y consideró que, en la reunión del Consejo Directivo de la CGT convocada para mañana, la dirigencia de la central obrera debería adoptar una posición de «más dureza para hacerle entender a un gobierno que escucha sólo a un sector de la sociedad».
En ese marco, el titular de La Bancaria recordó que «durante mucho tiempo», batalló «en soledad» explicando que «hacía falta una medida a nivel nacional, no sólo por el tema tarifas, sino también por la gran cantidad de pérdidas de puestos de trabajo por una apertura muy fuerte de la importación».
Con estos argumentos, sostuvo que el aumento en las tarifas dado a conocer ayer, «es parte de un plan que tiende a favorecer a los sectores de la economía identificados con los empresarios» porque forma parte de «una política económica del gobierno donde gran parte del ajuste recae en los trabajadores, en los asalariados».