Después de que afirmara que «en diciembre estalla todo», Barrionuevo bramó: «Que llegue el 2015 para terminar con este calvario”. Moyano a su vez anunció que se le acabó la prudencia, y Micheli agitó el fantasma del 2001, con próximas movilizaciones. Ese es el clima que se vive en el sindicalismo opositor y que podría llevar a que hoy lancen una nueva medida de fuerza.
El titular de la CGT Azul y Blanca, Luis Barrionuevo, confirmó ayer que se sumará al paro convocado por el titular de la CGT opositora, Hugo Moyano, antes de fin de año, dando por sentado que hoy habrá un anuncio en ese sentido.
El dirigente del gremio de los gastronómicos sostuvo que «en los próximos días» harán «una medida de fuerza contundente» para que el gobierno establezca cambios en el Impuesto a las Ganancias.
En una polémica frase, Barrionuevo lanzó: «Que llegue el 2015 para terminar con este calvario”. La afirmación del sindicalista llega después de que dijera que “en diciembre estalla todo”.
Por su parte, el titular de la CGT Azopardo, Hugo Moyano volvió a hacer uso de su picante verbal y lanzó una batería de frases contra el Gobierno Nacional en radio Mitre.
Si bien no blanqueó su apuesta por ninguno de los presidenciables en danza, Moyano coquetea con Mauricio Macri y termina siendo funcional al esquema de desestabilización. Barrionuevo, en cambio, fue más claro respecto a su alineamiento con Massa.
“Así como dicen que parece que el Gobierno bajó la persiana (sobre Ganancias y un bono de fin de año), también se puede terminar la prudencia en las organizaciones gremiales. La prudencia tiene un límite, y cuando nos faltan el respeto, se tomarán las medidas que se tengan que tomar. Todo tiene un límite. Esto está llegando a un límite”, sostuvo el dirigente camionero.
Moyano dijo que “el clima social no es el mejor, pero se profundiza el malestar con las expresiones de los funcionarios de turno. Se toman con bronca, porque parece que además de perjudicar al trabajador sacándole parte del sueldo, le toman el pelo. Parece que estamos en los mejores años de Suiza y la situación no es la mejor”.
El descontento del camionero se plasmará mañana cuando junte a su tropa en el edificio de Azopardo para analizar nuevas medidas de fuerza y no se descarta que Moyano vuelva al ruedo antes de fin de año.
Ese mismo día, en paralelo, los gremios del transporte volverán a verse las caras luego del paro de 3 horas que hicieron la semana pasada y también analizarán profundizar las protestas, por lo que parece que diciembre se viene más que caliente.
El tercer mosquetero de la oposición sindical, Pablo Micheli, jefe de la CTA opositora, a su vez azuzó el fantasma del 2001. Dijo que volverá a movilizar entre el 10 y el 20 de diciembre si el Gobierno no anuncia la exención de Ganancial al aguinaldo y un bono navideño.
“Si no hay una respuesta favorable, vamos a estar movilizados entre el 10 y 20 de diciembre”, dijo el sindicalista y anticipó que habrá “un fin de año malo en el que la gente va a estar muy angustiada, porque se vivirá el peor de los escenarios”.