Una encuesta de Manpower entre más de 700 empleadores argentinos revelo que el 36% planea dar trabajo mientras el 33% disminuirá la plantilla y un 28% espera poder mantenerla. «En comparación con otros países de la región, la expectativa de contratación en Argentina se mantiene estancada».
Con la profunda recesión que viene atravesando el país, la caída de consumo y la perdida del poder adquisitivo que algunos dicen empieza a ¿recuperarse? la preocupación que comenzó a aparecer en las encuestas de opinión en los primeros lugares, incluso sobre la inflación, es el empleo.
La fuerte baja del consumo, una de las razones de la baja de la inflación, hizo caer la actividad y se empieza a resquebrajar el mercado del empleo. Las empresas ajustan su oferta al nivel de demanda y hay mucha preocupación por el aumento del desempleo en la segunda mitad del año.
Así lo refleja la Encuesta de Expectativas de Empleo correspondiente al tercer trimestre de 2024, que lleva a cabo Manpower y que reveló la agencia de noticias NA, de la cual se desprende que se mantienen bajas las expectativas de contratación desde hace un año, y así seguirán al menos el tercer trimestre del año.
Los datos fueron obtenidos tras encuestar a más de 700 empleadores argentinos, quienes reportaron una Expectativa Neta de Empleo (ENE) de +3% ajustado por estacionalidad, demostrando un aumento de 2 puntos porcentuales en la comparación trimestral y sin cambios en la interanual.
La encuesta revela que el 36% de los empleadores planea aumentar sus dotaciones de personal, el 33% disminuirlas, el 28% no espera realizar cambios y el 3% restante no sabe si los realizará durante el periodo relevado.
«En comparación con otros países de la región, la expectativa de contratación en Argentina se mantiene estancada. Hace un año que nuestro país está perdiendo una oportunidad de oro de atracción de inversiones que sí la están captando los empresarios de otros países” afirma Luis Guastini, Director General y Presidente de ManpowerGroup Argentina y Director de Talent Solutions para Latinoamérica.
Los expertos justifican esto en dos fenómenos, uno el descripto arriba sobre ajustar la oferta al nuevo nivel de la demanda, y otro por el aumento de la población económicamente activa. Se ha empezado a ver el fenómeno del empleado pobre, tiene trabajo pero no alcanza. Por lo que debe salir otra persona del grupo familiar a buscar trabajo, lo que por definición estadística aumente el desempleo.
Segú un informe de Epyca, la consultora del economista Martin Kalos, “todas las ramas de actividad redujeron sus puestos de trabajo. Principalmente, en línea con la caída en su nivel de actividad, por ejemplo la construcción disminuyó su empleo en -2,4% intermensual y -13,5% interanual. Si se contabilizara el empleo público y el privado no registrado, la caída sería sustancialmente mayor tanto en este sector como en general”.
En base a los datos de SIPA para el último trimestre de 2023, dan como resultado que la caída de empleo en los primeros 3 meses de 2024 representa alrededor de 58 mil puestos de trabajo, de los cuales alrededor de 11 mil son de pequeñas y medianas empresas.