Inspectores de la cartera laboral y de la SRT se presentaron en la planta de Lavallol de Bridgestone para corroborar las denuncias del Sutna por malas condiciones laborales. Sin bien la inspección fue incipiente bastó para paralizar una máquina por los peligros que conlleva.
Este martes 31 de enero se llevó adelante una audiencia en el Ministerio de Trabajo, en el marco del reclamo por la eliminación unilateral del premio a la producción más base fija. La negociación pasó a un cuarto intermedio hasta el próximo jueves 9 de febrero.
En el mismo momento comenzaba una inspección del Ministerio de Trabajo y la Superintendencia de Riesgos del Trabajo (SRT) en la planta Bridgestone de Llavallol tras denuncias del gremio SUTNA.
La inspección fue llevada adelante por los inspectores de ambos organismos acompañados por dirigentes del sindicato, miembros de seccional y delegados de base.
Según detallaron desde el Sutna, los inspectores empezaron por el sector de vulcanizado, donde se «cocinan» las cubiertas y se «midieron las cargas térmicas de diferentes sectores donde los trabajadores se ven expuestos a altas temperaturas mientras desarrollan tareas pesadas en un lugar en donde están rodeados de máquinas de gran porte y estructuras metálicas, todas ellas con superficies sólidas, las cuales son factibles a producir, en caso de todo impacto, graves accidentes».
Allí un trabajador comentó que una de las prensas había sido inaugurada en el 2016 por el entonces presidente Macri, pero la misma, por problemas técnicos indefinidos, no funciona desde entonces. El gremio además señaló que el lugar no cuenta con la debida inyección de aire fresco, no funcionan los dispenser de agua fría y no cuenta con un lugar de descanso refrigerado para la recuperación física ante la exposición térmica.
En el recorrido de la inspección, el sindicato advirtió a los inspectores de la SRT y el Ministerio que en una máquina, «la calandra 5», existían numerosos lugares de atrape sin protección alguna y dado que esto producía un riesgo de vida evidente, se procedió a detener la operación de la máquina quedando parada hasta que se realicen las reformas correspondientes.
«La inspección finalizó con los inspectores extenuados por la exposición a las altas temperaturas, generando un acta donde se nos indicaba que se realizará un informe presentando los resultados de las mediciones y las resoluciones correspondientes», explicaron.
«Esta inspección, que sólo revisó un aspecto y algunos sectores de la planta de Bridgestone, alcanzó para demostrar las duras condiciones laborales que existen en esta empresa», señalaron y reprocharon que mientras tanto, la empresa «pretende ejercer presiones sobre los trabajadores, modificaciones arbitrarias y aumentos irresponsables de los ritmos de trabajo» en un clima de conflictividad provocado por el incumplimiento de «acuerdos firmados delante del Ministerio de Trabajo produciendo descuentos indebidos, mal manejo de las retenciones del impuesto a las ganancias y despidos digitados sin causa».
«Todo esto a pesar de que desde la finalización del conflicto del 2022, la producción de neumáticos en esta fábrica viene subiendo mes a mes sin que ello implique una baja en los precios de cubiertas a la venta.», resaltaron.