Se trata de Marcelo Mena Muñoz, líder del gremio de personal jerárquico de la minería y parte del secretariado nacional de la CTA de los Trabajadores. Calificó de «troskaje» y «ecoterroristas» a los vecinos que rechazan la minería. Malestar entre comunicadores y vecinos.
En una reñida votación, la semana pasada la Legislatura de Chubut rechazó el proyecto de iniciativa popular con el que se intentaba cerrar las puertas a la futura explotación minera en esta provincia. Fue por 13 votos a 12, con 2 abstenciones, y desactivó el potencial tapón que se podría haber puesto a la habilitación de la minería por zonas que, con dictamen favorable, espera tratamiento en el recinto.
Con el rechazo a la iniciativa, ahora los diputados tendrán que avanzar con el tratamiento de la denominada ley de zonificación minera, que habilita al desarrollo de esta actividad en dos departamentos de la Meseta central de Chubut.
La tensión minera, que se traslada a vecinos y comunicadores tuvo un protagonista del ámbito sindical que hoy fue repudiado. Se trata de Marcelo Mena Muñoz, líder del sindicato de jerárquicos Mineros (Asijemin), secretario Adjunto de la Federación de Trabajadores de la Industria (Fetia) y parte de la conducción nacional de la CTA de los Trabajadores.
En la discusión cotidiana que se da en la provincia, Mena Muñoz trató de «troskaje» y de «ecoterroristas» a los vecinos que salieron a protestar y periodistas. Esa calificaciones le valieron la condena pública del «colectivo de comunicadorxs de Chubut» y el pedido de que la central obrera lo repudie.
«Consideramos que su accionar más que un dirigente gremial resulta un vocero de los intereses económicos de las empresas mineras», señalaron en un comunicado que comenzó a circular hoy y en el que le piden a la CTA que tome cartas en el asunto.
Por último señalan el caso de la comunicadora Alejandra Sepúlveda quien denuncia ser hostigada por el gremialista en cada intervención pública sobre el tema minero.