(Por Pablo Maradei) Durante el mes de enero el gasto por el rubro discapacidad fue de casi 15.000 millones de pesos; más del 80% de lo que se usa del Fondo de Redistribución. Preocupación por un rubro que siempre está entre los reclamos sindicales.
Los sindicalistas quieren que el Estado realice un esfuerzo para sostener este rubro que es una verdadera aspiradora de dinero. La inflación hace lo propio y los números pasan a ser exorbitantes: hace casi exactamente dos años atrás, este rubro se llevaba 3.000 millones de pesos; hoy esa cifra, de acuerdo al relevamiento de InfoGremiales, pasó a 15.000 millones. En el caso de que no hubiera inflación y se mantuviera la nómina de discapacitados en cada una de las prestadoras, estamos hablando de que al año necesita 180.000 millones de pesos.
Piden que los ministerios de Transporte y Educación aporten parte de su Presupuesto a sostener estos dos subrubros del sistema de Discapacidad.
Explicó un dirigente que sigue de cerca este Debe y Haber: «La partida por Presupuesto para este 2023 es de 184.000 millones; casi todo va a terminar en Discapacidad». Y explica la entretela de lo que se está tratando de conseguir: «Ahora falta la Resolución Administrativa, que firman Salud y la Superintendencia de Salud; y luego el Ministerio de Economía refrenda; esa firma nos dejaría con este problema en principio resuelto porque se le asignaría la partida desde Economía».
La idea siempre que corre por detrás es despejar esta puja antes de la reunión de Sergio Massa con la dirigencia sindical que ya tuvo dos postergaciones; no obstante vale aclarar que si la reunión se hace en la CGT y en el contexto de un Consejo Directivo, no se discutirá esto en minuciosidad; a lo sumo se planteará como un tema a resolver. La juntada tendrá un tinte más político.
Hasta ahora, las obras sociales sindicales recibieron en 2022 unos 16.000 millones de pesos y en enero de 2023 otros 4.000 millones. Está a las claras que con eso no alcanza.
La trastienda política
Como se informó la semana pasada, Luis Barrionuevo convocó al tradicional asado sindical marplatense: allí ante los periodistas el anfitrión dejó correr el «ponerle una ficha a Wado». «Viste como es Luis, le gusta tirar esas cosas ante los periodistas; pero corre por cuenta de él y no de la CGT«, dijo sin ampliar un dirigente que estuvo en el mitin.
Esta semana circuló la versión de que Armando Cavalieri se había juntado con el gobernador cordobés Juan Schiaretti un par de días antes de la escisión del bloque del FdT en el Senado. Este mismo dirigente que suele estar en todos los mitines políticos vinculados a la CGT dijo a InfoGremiales: «Si fue así Armando no nos convocó a nada ni nos hizo saber de qué se trató; por ahora lo tomo como algo que circuló por la prensa sin darle mayor entidad».
Según pudo confirmar InfoGremiales desde el círculo más cercano de «El Gitano» no hubo charla ni apoyo alguno del sindicalista a la aventura presidencial del cordobés. «Lo están operando porque no sabe como posicionarse a nivel nacional», explicaron.
Es cierto que la CGT tradicional no se ha expedido ni se ha pegado a un dirigente con exclusividad; sí lo hacen otras vertientes sindicales como es la Corriente Federal que promueve a Cristina Kirchner para que sea candidata.