(Por Pablo Maradei) El mega decreto de Javier Milei cambió el escenario. El panorama de conflictividad que se avizoraba para febrero llegó a fin de año. Además rompió un vínculo que, en secreto, tejían dirigentes de la CGT y el ministro del Interior Guillermo Francos. La pelea por las formas y por el fondo.
El caso del discurso de un importante dirigente que cambió en solo 24 horas es paradigmático: en la previa al DNU, aunque posterior a los anuncios de Luis Caputo, un gremialista del sector industrial había dicho a este cronista que «diciembre vendrá con fuertes aumentos, pero entre el aguinaldo, un bono y las vacaciones el efecto se licuará un poco. El tema será cuando a fines de febrero venga la tarjeta y el comienzo de clases; en algunos casos las familias no podràn pagar la cuota. Es un mes medular; y la cosa se puede poner muy fulera».
Luego, anunciado el DNU, la CGT y ese dirigente en particular nuevamente consultado disparó: «El escenario cambió». Y es que a partir de la extensa y compleja normativa, los comunicados de los gremios presentando que están en Estado de Alerta y Movilización se acumularon en la fila de mensajes de Whatsapp. Los tiempos se aceleraron.
La hoja de ruta de la CGT tendrá su primera parada este miércoles 27 cuando realice la marcha a Tribunales para acompañar la presentación judicial que, como tantas otras, buscará frenar la aplicación del decreto. Luego, se fijará un paro general, aunque con fecha incierta: algunos proponen convocar a un Comitè Central Confederal; otros a un Plenario de Secretario Generales. Y el ferroviario Omar Maturano propone lanzar una huelga general.
En estricto OFF, un dirigente hizo saber a InfoGremiales que el movimiento obrero se siente «traicionado» por Guillermo Francos, el ministro del Interior del gobierno libertario, «porque nada de lo que venía conversando nos hizo mención a semejante nivel de cambios de las las leyes laborales» hacía presumir tremendas modificaciones.
El malestar terminó detonando, más tarde, la reunión con la que podían tejer alguna mesa diálogo para encontrar alguna alternativa consensuada. Será a todo o nada, entonces.
La Presidenta de la Comisión de Trabajo de la Cámara de Diputados, Vanesa Siley, se refirió al nueva normativa impulsada por Javier Milei, haciendo pie en la habilitación de los aumentos de las Prepagas como signo del impacto: «Basándose en el decreto que incluso legalmente no tiene vigencia demuestra que el problema del DNU radica no solo en las formas, en su inconstitucionalidad ni que pasó por el Congreso de la Nación, sino en el fondo de lo que ese decreto hace: salieron a atacar rápidamente el bolsillo de la gente. Por eso hay que cuestionar no solo la forma sino también el fondo del DNU».