En un clima de máxima tensión, el viernes cerró la presentación de listas en la Unión Tranviarios Automotor (UTA). Ante la junta electoral se formalizaron dos listas que competirán el 18 y 19 de octubre por la conducción del poderoso gremio de transporte.
Por un lado Roberto Fernandez buscará revalidar su condición de secretario General, que ostenta desde el año 2006, y por otro Miguel Angel Bustinduy actual secretario de Organización, proveniente de la seccional Capital intentará de desplazarlo.
Se trata de una de las batallas peso pesado por lo estratégico del gremio y por la trascendencia que tomó en los últimos años la UTA pivoteando en diversos sectores del espectro sindical y siendo el garante del éxito o del fracaso de cada paro general.
Fernandez es uno de los gremialistas más amarillos, que ni siquiera esquivó un convite de la Rosada cuando el motivo fue sentarse en la mesa que anunció tarifazos al transporte. Cuenta con terminales en el Gobierno porteño y en el nacional, vía el Ministerio de Transporte, más precisamente Guillermo Dietrich.
Bustiunduy es el hombre fuerte de la zona metropolitana y cuenta en su espalda con el guiño de DOTA, uno de los principales actores del complejo mundo del transporte automotor.
Se descuenta que será una elección caliente, por lo que todas las miradas del mundo sindical y del Gobierno están expectantes por el desarrollo. Será uno de los platos fuertes del segundo semestre del año, apenas 20 días después de que se decida el futuro del Sindicato de Comercio.