(Por Pablo Maradei) España aceptó hacer una reforma laboral en 2012. InfoGremiales aprovechó la visita de funcionarios del ministerio de Trabajo de este país para saber de qué se trataron los cambios y cuáles fueron sus resultados 10 años después. La palabra de Cristina Faciaben, la secretaria de Internacional, Cooperación y Migraciones de la CCOO (Confederación Sindical de Comisiones Obreras) ayuda a esclarecer el estado de situación.
Históricamente, Argentina y los países periféricos ven qué ocurre en las repúblicas centrales. Para entender ese panorama, esta semana, como contó InfoGremiales, nuestro país recibió la visita de la vicepresidenta de España y ministra de Trabajo y Economía Social de España, Yolanda Díaz. Se reunió con la ministra de Trabajo local, Kelly Olmos, empresarios y con los sindicalistas: Héctor Daer, Gerardo Martínez y Hugo Yasky; entre otros. En declaraciones del titular de la CTA fue «para tener un panorama de la situación laboral en Europa». Díaz observó que «ambos países tienen los índices más altos de desocupación en la parte etaria de la juventud».
En tren de darle una continuidad a esta visita y para saber, desde otra óptica, qué está ocurriendo con el clima laboral en España, InfoGremiales entrevistó a Cristina Faciaben, la secretaria de Internacional, Cooperación y Migraciones de la CCOO (Confederación Sindical de Comisiones Obreras).
Esta entidad es desde 1990 la central con mayor representatividad de trabajadores con alrededor de un millón de representados. Ella es catalana y su afiliación viene del sector industrial, puntualmente de la rama del metal. En España las organizaciones sindicales se conforman territorial y sectorialmente.
-Te llevo a la Reforma Laboral de 2012, bajo la gestión de gobierno del Partido Popular en cabeza de José María Aznar: discursivamente siempre se escucha que las reformas laborales son para generar más trabajo. ¿Fue así en España?
-Las reformas no han generado empleo. Y con un agravante: La mayoría de nuestras empresas son pequeñas y la competitividad del empresario se basa en reducir costes salariales y de producción; no es por la vía de la diferenciación o calidad. Las reformas laborales le han facilitado a los empresarios poder disponer de la fuerza de trabajo al valor más bajo posible. Y esto es viable porque nuestro pleno empleo implica más o menos un 8% de desempleo de base, por lo que siempre hay un ejército de desempleados dispuestos a trabajar. En España hay una problemática endémica que tiene esa base del 8%; y además hay un problema para cruzar la oferta y la demanda. España tiene un número importante de diplomados, pero al mismo tiempo hay déficit de trabajadores cualificados. También se nota el fracaso escolar, de gente que no alcanza la titulación.
-Te traigo más acá en el tiempo: aquella reforma de 2012 se reformuló en diciembre de 2021. ¿Qué consecuencias trajo?La Reforma Laboral que se aprobó hace un año eliminó los contratos temporales, algo que estaba plagado aquí: en cualquier rubro accedías a un trabajo bajo contrato temporal en el que, para colmo, las indemnizaciones son bajísimas. Todo esto se ha prohibido a partir del año pasado. Pero es vergonzoso como se llegó aprobar esta ley. Esto es porque la alianza entre el PSOE y Podemos está en una situación precaria y necesita de otros bloques para sacar las leyes. En este caso fue peor aún: terminaron ganando por un voto que lo obtuvieron de un diputado del Partido Popular que se equivocó al votar. Este señor estaba enfermo y en su casa y vota a favor por error.
-¿Cómo está la situación laboral hoy en tu país?-Acaban de salir los datos económicos y estamos en un 11% de desempleo y hemos llegado al 18%; y ha llegado, incluso, hasta el 40% en el caso de jóvenes entre 16 y 25 años. Los jóvenes siempre han estado afectados por el desempleo. En ese sentido en España se combina un alto nivel de desempleo con precariedad.
InfoGremiales recolectó estos datos a 2020 como muestra; y que reflejan la tasa de trabajadores temporales por efecto de la Reforma Laboral de 2012; algo que se opuso y batalló el sindicalismo español:
Sobre una población de casi 50 millones:
– Población Ocupada: 19.681.000
– Sector Público: 3.248.000 (16,5%)
– Sector Privado: 16.433.000 (83,5%)
– Población Desocupada: 3.313.000
– Tasa de Trabajadores temporales 21%
-Mencionaste justamente cómo están afectados los jóvenes, sobre ese punto se habló en la visita de Yolanda al país. ¿Cómo es ella como ministra de Trabajo del gobierno de Pedro Sánchez?-Ella es de Galicia y es abogada laboralista. Se crió en el ambiente sindical por su padre, que fue secretario general de comisiones obreras. En cuanto a su labor ha hecho un esfuerzo titánico por conseguir pactos sociales. Este Gobierno está aprovechando mucho de este discurso social gracias a ella porque es muy dada para llegar a acuerdos. Yolanda es un caso excepcional dentro del Gobierno porque cree en el diálogo social, no así el ministro de Inclusión, Seguridad Social y de Migraciones; un tema que me compete a mi directamente. A este ministro, José Luis Escrivá, no le interesa el diálogo. No diáloga con empresarios ni sindicatos. Las cuestiones laborales tienen que pasar por el diálogo social: la Constitucion reconoce en esa función a sindicatos y empresarios.
-¿Qué está pasando con el mundo de las Fintech?… tanto en nuestro país como en Estados Unidos hubo una catarata de despidos.-No es un problema principal. En ese sentido hubo un desarrollo tecnológico brutal, pero no había personal para cubrirlo. Queremos que haya formación continua y a lo largo de la vida para adaptarse a los cambios. Las Fintech u otras empresas exigen un nivel alto de conocimiento específico relacionado con alguna especialización y aquí puede darse el caso que haya ese desajuste: que no haya perfiles que se adecúen a esas búsquedas.
A su vez, la Unión Europea sacó una resolución directiva (la Blue Card) que a personas con alta cualificación se les da automáticamente el permiso de trabajo europeo. Es un nuevo colonialismo: descapitalizas a los países con menos calificaciones para que la gente trabaje en países centrales. En España ocurrió con Sanidad y la Investigación: los cerebros se han ido de España. Esa fuga de cerebros se habiendo pagado a los alumnos para formarlos; pero nunca lo aportarán a nuestro país. Ahora lo promueve la UE.