Sindicatos de empleados estatales de la provincia de Buenos Aires rechazaron por considerar «insuficiente» la propuesta del gobierno de María Eugenia Vidal de otorgar una mejora salarial de un 3,6 %, ofrecida en una reunión paritaria que se concretó ayer por la tarde en La Plata.
Los gremios enrolados en la ley 10.430, entre los que figuran Ate y Upcn, se quejaron porque consideraron «pobre» la propuesta y pasaron a un cuarto intermedio a la espera de «una oferta superadora».
El secretario general de ATE y de la CTA Autónoma de la provincia de Buenos Aires, Oscar De Isasi, confirmó que «exigimos un aumento del 22 por ciento de bolsillo, teniendo en cuenta que el salario básico ronda los 9.600 pesos».
El dirigente gremial explicó que «el otro tema fundamental a resolver de manera urgente tiene que ver con garantizar la continuidad laboral de más de 11.500 trabajadores que realizan tareas de manera precaria en el Estado provincial y que el 31 de diciembre ven peligrar su fuente laboral».