(Por Jorge Duarte @ludistas) Se trata de un poder que le firmó Fernán Quirós a un buffet de abogados para cobrar supuestas prestaciones de los hospitales públicos a las obras sociales. Les reclaman millones por servicios que los auditores comprueban inexistentes. «Te mandan un listado enorme, si no impugnaste en unos días tenés que pagar y después reclamar», aseguran. «Tiene afán recaudatorio. Es como con las grúas».
Las Obras Sociales sindicales están en alerta. En las últimas semanas comenzaron a llegarle extensos informes reclamándoles pagos por supuestas prestaciones que la salud pública porteña le dio a sus afiliados recientemente. Se trata de montos millonarios en todos los casos y de servicios que llaman la atención.
«Si un afiliado va a un hospital público es lógico que nos lo facturen, pero lo que nos envían no es cierto. Puede ocurrir con una guardia, pero es muy improbable que ocurran muchos casos y vayan a realizar tratamientos prolongados al sistema de salud público en lugar de los sanatorios privados que les ofrecemos», aseguró uno de los dirigentes sindicales afectados por la maniobra.
La base de la maniobra nace en un poder que el Ministro de Salud porteño, Fernán Quiroz, le otorgó a un grupo de abogados para gestionar la «Facturación y cobranza de los efectores públicos (FACOEP)».
Algunos de los letrados son viejos conocidos. Incluso estuvieron a un paso de ser beneficiados por el intento de derivar fondos de IOMA a la Ciudad que el propio Horacio Rodríguez Larreta impulsó antes de la salida de María Eugenia Vidal como gobernadora y ya consumada su derrota electoral.
Con ese poder los abogados, en nombre de la FACOEP, le envían a las obras sociales un listado de presuntas prestaciones que dieron en favor de afiliados, junto con las facturas correspondientes y el monto de los intereses por el plazo que tiene de deuda. En caso de no responder según los plazos, comienzan inmediatamente un juicio ejecutivo para su cobranza. En todos los casos se trata, al menos, de 7 cifras.
«Tiran y después ven», le dijo otro de los sindicalistas anoticiados por la supuesta deuda multimillonaria. «Me mandaron casos para cobrarme que ni siquiera eran nuestros afiliados en el período en el que dicen que se hizo la prestación».
«Ya hace unos meses empezamos a recibir. Lo hablamos entre varios y le está pasando a todas las obras sociales. En algunos casos los auditores verifican que los afiliados no eran de la obra social y en otros los afiliados le negaron la prestación a los auditores», explica.
«Si fuera una guardia de un fin de semana, podría tener sentido. Pero que haya muchos afiliados de todas las obras sociales encarando tratamientos prolongados en el sistema público teniendo obra social hace todo muy poco probable», añade otro de los informados de las «deudas» que prefiere no hablar en on. En el imaginario la chance de que Larreta sea Presidente lo convierte en una actor temible de la política.
«Te mandan un listado enorme, si no impugnaste tenés que pagar y después reclamar. Esto sólo tiene afán recaudatorio. Es como lo de las grúas», concluye.