En una elección que marcó un pico de participación en el Sindicato de Empleados de Comercio (SEC), Armando Cavalieri y Ramón Muerza se enfrentaron ayer en las urnas y se espera un final todavía abierto, a pesar de que circularon resultados.
Cavalieri difundió que se impuso con el 50,43% (10.955 votos) sobre Muerza, un hombre surgido de su propio riñón, que logró el 48,52% (10.540 votos). Pero desde el entorno de Muerza señalaron que la victoria fue de ellos por 208 sufragios.
Por lo ajustado del resultado, votos impugnados y urnas cuestionadas, todos los caminos indican que el acto eleccionario va directo a la judicialización para definir el resultado.
Como se esperaba, Cavalieri se hizo fuerte con su ejército de jubilados mercantiles, mientras que Muerza ratificó su inserción en los trabajadores activos que se volcaron a votar como hacía muchos años no sucedía.
De fondo está el rol de Jorge Triaca, abiertamente en campaña para conseguir la perpetuidad del «gitano» y el mar de denuncias y fallos judiciales que abren una incógnita sobre todo lo actuado y dejan la posibilidad de que se declare la nulidad.