«La fe cristina siempre anuncia ‘el evangelio del trabajo’ e insiste en la centralidad del mismo como ordenador y pacificador de la vida personal, familiar y social. No hay posibilidad de poder desplegar un proyecto de vida sin trabajo. No hay paz social sin trabajo, no hay humanidad sin trabajo, la persona se desmorona sin trabajo», señaló la agrupación católica.
En el texto, el equipo de la Pastoral Social de la Diócesis cordobesa transmitió «solidaridad con los trabajadores despedidos de las Fábrica Militar de Pólvoras y Explosivos de Villa María y de Río Tercero».
Señaló que se trata de «industrias que han sido verdaderas columnas de las comunidades promoviendo el trabajo y el desarrollo integral».
«Comunidades que a su vez han contribuido con sus hijos en la evolución de estas empresas con el aporte de su trabajo cotidiano, su profesionalización, su compromiso y asumiendo los riesgos de este rubro tan delicado, muchas veces afectando su salud física y psíquica y poniendo en riesgo hasta su propia vida», surbyó.
Además, remarcó: «Ante la decisión tomada en estos días: Invitamos a que se escuche el legítimo reclamo de los trabajadores a ser parte activa en los criterios de reconversión de Fabricaciones Militares».
«Apelamos a que se dé a conocer con certeza y precisión el proyecto que se plantea para el futuro de Fabricaciones Militares. Entendemos que no son suficientes enunciados generales y expresiones voluntaristas. Es necesario evitar la incertidumbre que impide la serenidad necesaria para fortalecer el compromiso del trabajador y la comunidad general con la empresa y sus objetivos», añadió.
Más de 130 trabajadores fueron despedidos de las plantas de Fabricaciones Militares de las provincias de Córdoba y Santa Fe, mientras que el interventor de la empresa, Luis Riva, justificó que la medida se tomó para evitar el «cierre definitivo».
De acuerdo a la versión del diario La Voz del Interior, en el distrito cordobés de Villa María se produjeron 42 cesantías, sobre un total 375 empleados mientras que en Río Tercero se trató de 59 despedidos, sobre 439 trabajadores.
Mientras tanto, Alberto Labudia, delegado gremial en la fábrica de Fray Luis Beltrán, provincia de Santa Fe, indicó en declaraciones a la radio Cadena 3 que se produjeron «30 despidos».