La decisión del Ministerio de Defensa de «socorrer» con LADE a la empresa low cost, Flybondi, afectada por la explosión de contagios de COVID-19, produjo malestar en los gremios aeronáuticos. Calificaron el acuerdo de «lesivo a la política aérea nacional» y lo acusaron de beneficiar «a los enemigos del trabajo aeronáutico argentino digno y altamente calificado».
El pasado 15 de enero, la cartera de Turismo que lidera Matías Lammens, pidió la intervención a su par de Defensa la participación de LADE para apuntalar a los cost Flybondi. El argumento es sostener «la presente temporada estival cuenta con altos niveles de demanda turística en nuestro país superando, en los principales destinos de cada provincia, el 90% de ocupación».
La decisión desató la furia de los sindicatos UPSA, APLA, APA y ATEPSA, quienes les exigieron «a los ministros de Turismo, Matías Lammens, y Defensa, Jorge Taiana, que se abstengan de avanzar en la aplicación de este convenio, por ser lesivo a la política aérea nacional en su conjunto y al interés de los trabajadores y trabajadoras aeronáuticos».
Asimismo, expresaron a través de un comunicado conjunto que «en el momento en que es más violenta la campaña contra Aerolíneas Argentinas y su personal, por parte de los defensores del modelo neoliberal impulsado por el macrismo, aparece un convenio promovido por el Ministerio de Turismo y ejecutado por el Ministerio de Defensa para que LADE, empresa aérea estatal de fomento bajo jurisdicción de la Fuerza Aérea Argentina, opere un avión con personal militar para vuelos de la empresa low cost Flybondi”.
Para los gremios «es público y notorio que, a nivel mundial, la ola de contagios por la pandemia entre el personal de vuelo y de tierra de muchas líneas aéreas motivó miles de reprogramaciones y cancelaciones de vuelos. En nuestro país, las autoridades de Aerolíneas Argentinas y Jetsmart han anunciado posibles cambios y reprogramaciones en algunos vuelos».
«Sugestivamente, el convenio firmado por el Ministerio de Defensa con Flybondi sólo parece reflejar preocupación por la operación de esta empresa. Precisamente, la empresa emblemática y favorita del período macrista de gobierno, durante el cual sostuvo su política de precios de dúmping sobre la base de la precarización laboral y la supresión de las bandas tarifarias que regulaban la oferta», dispararon.
Y recordaron que el dispositivo macrista promovió «la operación de un aeropuerto militar ‘low cost’ (El Palomar) reciclado por el Estado Nacional, el desfinanciamiento público permanente de la aerolínea de bandera y la guerra declarada a los gremios aeronáuticos a través de la creación de un sindicato pro-empresa rápidamente aceptado por el Ministerio de Trabajo de ese período».
Para los gremios el acuerdo «es contrario a una política aérea al servicio del interés nacional que una línea aérea estatal de fomento como LADE sostenga a una empresa creada deliberadamente para convertir el transporte aéreo argentino en un negocio privado».
Por último, solicitaron al Gobierno Nacional «coherencia en la defensa de nuestra aerolínea y nuestras empresas aeronáuticas de bandera y del trabajo aeronáutico argentino digno y altamente calificado. Las contradicciones internas y pujas de intereses sólo benefician a sus enemigos».