El Sindicato del Personal de Industrias Químicas y Petroquímicas cerró un año circular. Es que la organización que comanda Facundo Aveiro había abandonado hace meses, denuncia pública mediante, la Federación de Sindicatos de Trabajadores de la Industria Química y Petroquímica (FESTIQyPRA) que comanda Rubén Salas, pero ahora regresó.
El de Aveiro es el gremio mayoritario de la actividad que tras una ruptura con su familiar, Salas, había recalado bajo el paraguas de la Federación Argentina de Trabajadores de Industrias Químicas y Petroquímicas (Fatiqyp) que conducía Fabían Hermoso.
Pero la posterior detención, con escándalo de corrupción incluido de Hermoso, y el inicio de un proceso de intervención que todas las voces del mundo sindical señalan que terminará recalando en la Fatiqyp, lo hizo retroceder.
De hecho el Ministerio de Producción y Trabajo designó un interventor para la asociación sindical de trabajadores de industrias químicas, petroquímicas y explosivas. La medida fue oficializada en el Boletín Oficial, mediante la resolución 82/2019 que cuenta con la firma del ministro de esta cartera, Dante Sica.
De esta manera, fue nombrado Juan Mariano López del Valle como delegado normalizador para esta asociación sindical, que se suma a las casi dos decenas intervenidas desde el arribo de Cambiemos a La Rosada.
“Si el sindicato no se desvinculaba de esa Federación corría el riesgo de ser arrastrado a la ruina”, había dicho Aveiro al momento de dejar a Salas, lugar al que ahora regresa..
Se trata del primer gremio que abandona la Fatiqyp preventivamente, en lo que todo el mundo señala como una crónica de una intervención anunciada.