La Legislatura porteña tratará hoy, en comisión, un proyecto del Ejecutivo para actualizar las asignaciones familiares de los empleados públicos de la ciudad de Buenos Aires, que permanecen congeladas desde 2013, y que fue elaborado tras un fallo judicial que ordenó la suba de los montos.
La iniciativa será detallada por funcionarios de la administración porteña desde las 15.30 en el salón San Martín del Parlamento capitalino en el marco de la reunión de Legislación del Trabajo.
El expediente remitido por el Ejecutivo dispone la creación del Régimen de Asignaciones Familiares para el personal del Estado, entre ellos, unos 47.000 trabajadores de los sectores administrativo, docente, salud y policías, que están en condiciones de percibir el beneficio.
Puntualmente, establece que el monto de la asignación «se conforma en unidades móviles de asignaciones familiares», en tanto que contempla dos actualizaciones por año, en enero y julio.
En el caso de las asignaciones por hijo, el proyecto determina un monto más elevado de pago a los trabajadores con menos ingresos, al tiempo que fija el tope de $114.500 de salario bruto para percibir el beneficio.
Y suma «la asignación especial por violencia de género» que fija «el pago de una suma de dinero que se abonará por única vez, a la mujer o a la persona del colectivo LGBTIQ+ en el mes que acredite la denuncia judicial o policial».
De aprobarse, aumentará el monto de las asignaciones familiares que está estancado desde 2013, según precisaron fuentes gremiales, que consignaron que la falta de actualización «hace que la asignación familiar por hijo sea de $270».
La actualización fue ordenada hace un año a la gestión local por el juez Marcelo López Alfonsín, que consideró, por entonces, que el monto de las asignaciones era «irrisorio frente a los efectos inflacionarios y los aumentos del costo de vida».
El legislador del Frente de Todos Santiago Roberto calificó a la propuesta como «un avance» dado que «desde el 2013 que no se actualizan», no obstante advirtió que «vamos a trabajarlo en la comisión para modificar los rangos de ingresos establecidos».
«Con el tope de $114.500 de salario en bruto, se quedan afuera de la posibilidad de recibir la asignación muchos docentes que trabajan doble turno», precisó.
Por su parte, la diputada Amanda Martín, del Frente de Izquierda, analizó que «hace ocho años que las asignaciones están congeladas y Rodríguez Larreta mete un proyecto que empeora y sin cláusula de inflación».