En las últimas semanas el Ministerio de Trabajo dictó, sistemáticamente, conciliación obligatoria en distintos conflictos entre grandes gremios y los sectores empresarios involucrados. Importantes ramas que laborales podrían generar intensas batallas sindicales por lo que las negociaciones se aceleran ante lo que podría ser una escalda sindical.
Desde que se convocaron las partes a la negociación paritaria se preanunciaba que en el sector de Alimentación podría detonarse un conflicto. El gremio, la Federación Trabajadores de Industrias de la Alimentación (FTIA), de los más duros para negociar se plantó en u reclamo del 40%. Desde las cámaras ofrecieron un 28%. en cuotas. Ante la imposibilidad de cerrar un acuerdo el sindicato comenzó un plan de lucha que sólo se detuvo ante la conciliación dictada por la cartera laboral.
Por su parte, los ferroviarios del Sarmiento conducidos por “el Pollo” Sobrero desataron un conflicto intenso contra el Ministro del Interior y Transporte, Florencio Randazzo, reclamando el pago de una indemnización por el cambio de firma en esa linea de trenes. Ante la negativa del funcionario a acceder al pago, extendieron por una semana un “quite de colaboración” que generó demoras de hasta una hora en el servicio. Depusieron la actitud al encontrar una canal de diálogo mediante la conciliación obligatoria.
Distinta es la situación que enfrenta la Unión Obrera Metalúrgica de Antonio Caló. Mientras que el gremio fue “amigable” al momento de firmar sus paritarias, el problema surigó cuando las industrias siderugicas se negaron a aplicarlo en esa rama. Luego de charlas fallidas, el sindicato decidió un paro de 24 horas en el sector y las medidas de fuerza cesaron por la conciliación obligatoria que todavía rige. De todos modos el sindicato mantiene un acampe para presionar por una solución pronta.
Con paritarias que se extendieron por meses y un paro nacional decretado, también se tuvo que establecer un mecanismo de conciliación obligatoria para los colectiveros de la UTA. Desde el gremio, conducido por Roberto «el Gallego» Fernandez vienen insistiendo en conseguir una recomposición salarial del 35%. Hasta el momento sólo pudieron cerrar una suma puente que sirva como paliativo mientras se desarrollan las charlas.
Los cuatro en cuestión son sectores importantes en los que todavía no se llegó a acuerdos y que están en la cuenta regresiva para retomar el camino de las medidas de fuerza.
Con paritarias que se complejizan y empresarios que muestran posiciones intransigentes, la resolución pende de un hilo que parece estar al borde de cortarse y permitir un etapa de conflictividad sindical intensa.