La Unión de Trabajadores del Instituto Nacional de Servicios Sociales para Jubilados y Pensionados (UTI), que agrupa a los empleados del PAMI y está afiliada a la CGT, reivindicó la «jornada nacional de protesta y esclarecimiento» realizada en rechazo de la aplicación del tributo sobre los ingresos y advirtió que «el salario no es ganancia».
El acto central de la protesta se realizó durante el mediodía en el hall del edificio de la sede central del organismo público no estatal, en la avenida Corrientes 665 de la ciudad de Buenos Aires, ocasión en la cual el titular del gremio, el tucumano Osvaldo Barreñada, aseveró que «los aumentos salariales se esfuman con el Impuesto a las Ganancias”.
El gremio inició en los últimos días una campaña nacional de la que participan los trabajadores del PAMI y distribuyó carteles y afiches contra la aplicación del tributo.
«El salario no es ganancia. Esa palabra proviene de la antigüedad, de hace muchos siglos, cuando los trabajadores percibían sal en lugar de dinero por sus tareas. En aquella época a nadie se le cobraba impuesto por recibir ese ingreso», sostuvo Barreñada.
El dirigente planteó que «el salario es la retribución por el esfuerzo realizado para vivir de forma digna y para que los hijos de los trabajadores se eduquen y gozar en algún momento de recreación o descanso”.
Para el dirigente del gremio del PAMI, desde hace tiempo «el trabajo parece valer cada vez menos y, por más aumentos salariales que se logren, se licúan por Ganancias».
«Al mes siguiente de cada uno de los últimos aumentos obtenidos, el personal del PAMI terminó cobrando menos que el mes anterior. Hay que comparar el ingreso bruto de hace un año con el actual para determinar el incremento logrado. Pero ello lamentablemente no se trasladó al bolsillo de los trabajadores sino que fue a parar a Ganancias», enfatizó.
El gremialista reivindicó a los 13 mil trabajadores del PAMI y convocó a la unidad de todos los sindicatos del sector para impulsar «una lucha conjunta para alcanzar el objetivo».