Los bancarios irán este lunes a una audiencia decisiva en el marco de la conciliación obligatoria que les impuso el Ministerio de Trabajo. El gremio se convirtió en el emblema sindical de la pelea por el impacto de Ganancias, por lo que el resto del mundo laboral sigue atento las negociaciones. Piden que las empresas compensen a los trabajadores.
Sergio Palazzo y la Asociación Bancaria (AB) tendrán hoy una nueva audiencia en el Ministerio de Trabajo, en el marco de sus complejas discusiones paritarias que comenzaron en enero y ya llevan casi dos meses sin avances significativos.
En esta oportunidad, la cumbre toma especial relevancia por tratarse de la primera tras la conciliación obligatoria que impuso la cartera laboral el pasado jueves. Ese día los bancarios paralizaron la atención al público en todas las sucursales del país.
«Por una recomposición salarial digna, por una solución al absurdo impuesto a las ganancias, por nuestros derechos, este jueves las trabajadoras y trabajadores bancarios paramos!!!», fue la premisa con la que el gremio difundió la huelga.
Al ubicar a Ganancias como el eje para destrabar las negociaciones salariales, Palazzo convirtió la paritaria de los bancarios en un caso testigo para el mercado laboral. Es seguida de cerca por la mayoría de las actividades que en cuestión de días iniciarán sus propias charlas y tienen al impuesto como una traba adicional.
«Más allá de los porcentajes y revisar las paritarias del 2022, que el sector empresario se haga cargo de parte del impuesto a las Ganancias que hoy pagan los trabajadores«, sostuvo Palazzo.
La llave que encuentren las partes para poder cerrar este conflicto podría convertirse en uno de los parámetros para el resto de las negociaciones colectivas.
«Estamos reclamando una compensación. Mientras no haya, no habrá paritaria posible que podamos acordar», avisó Palazzo y dejó la pelota del lado empresario.