Con la voluntad de superar la histórica controversia en relación al contenido y alcance del Convenio 87 de la Organización Internacional del Trabajo (OIT), la ministra de Trabajo Raquel «Kelly» Olmos manifestó su apoyo al conjunto de trabajadores representados por la Confederación Sindical Internacional (CSI) en su solicitud de consulta a la Corte Internacional de Justicia de La Haya.
El Convenio 87 de la OIT refiere a Libertad Sindical y Protección del Derecho de Sindicalización (1948). La cuestión en debate es si este instrumento internacional contiene el derecho de huelga. Al respecto, en una carta dirigida a Gilbert Houngbo, director general de la OIT, Olmos expresó que “los mandantes tripartitos han realizado varios intentos para
superar la prolongada controversia interpretativa”, intentos que no han llevado a un resultado consensuado.
Según la ministra, de persistir estas controversias sobre la interpretación jurídica, el organismo “debería recurrir al procedimiento previsto en el artículo 37, apartado 1, de la Constitución de la OIT, y someter la cuestión a la Corte Internacional de Justicia”.
De este modo, el gobierno argentino, representado por la ministra de Trabajo, dio contundente apoyo a la solicitud de los trabajadores. En efecto, su carta reconoció que el derecho a huelga es un derecho humano fundamental incorporado en el Convenio mencionado; reafirmó la histórica posición de nuestro país al respecto, y requirió el tratamiento inmediato de la solicitud mencionada en la próxima reunión del Consejo de Administración de la OIT, a realizarse en noviembre.
Lo expresado por la ministra Olmos mereció el reconocimiento internacional de la Sra. Catelene Passchier, presidenta del Grupo de Trabajadores de la OIT, quien destacó la posición y la importancia que ha tenido la carta de la Sra. Kismer de Olmos en la “consecución de la decisión de celebrar una reunión especial del Consejo de Administración en el mes de noviembre para discutir este asunto”.