El ministro de Producción, Matías Kulfas, anunció una inversión de 26 millones de dólares para reabrir una planta de calzado en Chivilcoy. Fuentes del sector confirmaron que inyectarán recursos pero lo acusaron de meterle «inflador» para la foto. En lugar de los 150 empleos de los que se habló generarán 25.
El ministro de Desarrollo Productivo, Matías Kulfas, anunció el viernes una multimillonaria inversión para reactivar una fábrica emplazada en la localidad de Chivilcoy. Se trata de la planta ex Paquetá, que producía para Adidas, y que había quedado desmantelada por la crisis económica generada en el macrismo.
Según el funcionario, Penalty invertiría unos 26 millones de dólares para ponerla en marcha y reanudar, así, la confección de calzado e indumentaria deportiva.
La noticia, que circuló con fuerza el fin de semana, despertó malestar en el sector. Empresarios y sindicalistas de la actividad cruzaron mensajes respecto de la información oficial y de sus precisiones.
Fuentes de la actividad le confirmaron a InfoGremiales la reactivación de la planta es un hecho, pero le bajaron el tono al anuncio. De hecho, sostuvieron que Kulfas le metió «inflador» para subirlos a la campaña electoral que se desarrolla por estas horas y mostrar su «gestión».
«Es real la inversión. Pero no son esos números. Lo exageró mucho para la foto», explicaron. Y apuntaron al ministro por «impulsarlos» a decir ante la prensa que generarían 150 empleos.
Lo cierto, entonces, es que Penalty activará la planta que dejó Adidas, utilizará para ello la mayoría de insumos importados y que, a partir de ello, se generarán unos 25 puestos de trabajo.
El «entredicho» generó mucho ruido entre las partes cuestión. Y lo que era inicialmente una buena noticia para todos terminó convirtiéndose en una señal de alarma en la relación de la actividad con un ministerio estratégico para la recuperación de la industria.