El ministro de Desarrollo Productivo, Matías Kulfas, sostuvo que es «impensable» avanzar en una reducción de la jornada de trabajo en la Argentina y lo asoció inmediatamente a una reducción proporcional del salario. De esta forma, quedó aislado de las iniciativas generadas por diputados del Frente de Todos.
Según afirmó Kulfas a Radio Futuröck, las propuestas de reducción de las horas de trabajo se llevaron a cabo en países con mercados laborales «muy desarrollados» y con una «reducción proporcional del salario».
«Hay que ser cuidadosos con ese tema porque en los países donde ha habido avances en este sentido son países desarrollados y en general han incorporado un esquema de reducción proporcional del salario, porque estamos hablando de países donde el mercado laboral está muy desarrollado», aseguró.
Por su parte, en el mes julio de este año, el Gobierno de Colombia, presidido por Iván Duque Márquez, ha sancionado la ley que establece la reducción de la jornada laboral de 48 a 42 horas sin disminución del salario ni en detrimento de los derechos y garantías laborales.
El ministro salió al cruce de legisladores del Frente de Todos como Hugo Yasky y Fernanda Raverta quienes militan el proyecto del dirigente ceteísta en el Congreso. Incluso de funcionarios como la ministra de Trabajo bonaerense Mara Ruíz Malec o el ministro de Trabajo de la Nación Claudio Moroni, quienes plantearon que es factible evaluarlo.
Mujeres Sindicalistas en la Corriente Federal ya anunciaron que la reducción de la jornada laboral será el tópico de su próximo cuadernillo de formación, lo que deja del mismo lado a una lista nutrida de legisladoras y funcionarias.
Sergio Palazzo, precandidato a diputado nacional, próximo a ingresar en las próximas elecciones al Congreso de la Nación, también se expresó a favor de la reducción de jornada. La diputada nacional y dirigente del gremio bancario Claudia Ormachea, presentó un proyecto de ley en la Cámara baja en el 2020 al respecto.
Un documento gremial firmado por los dirigentes enfatizó que desde hace décadas «una continuada innovación tecnológica que se sustenta en la ciencia, el esfuerzo de los trabajadores y la experiencia laboral concreta, y la creciente incorporación de procesos de automatización, robotización, informatización, inteligencia artificial y digitalización reducen la carga laboral, los tiempos de la producción y el empleo en el contexto mundial».
Además, puntualizaron que los beneficios de la incorporación de tecnología deben concretarse a favor de las empresas y también de los trabajadores a partir de una «mejor distribución del empleo y del tiempo para actividades personales y necesidades familiares».
Y si faltaran nombres resonantes, el ex diputado y uno de los abogados laboralistas más renombrados del país Héctor Recalde, argumentó en más de una oportunidad sobre la posibilidad, necesidad y beneficio de avanzar en ese proyecto.
Matías Kulfas, sin embargo, rechazó el cuestionamiento sobre la alta cantidad de horas que se trabaja en el país y dijo que «la jornada laboral en Argentina es una jornada estándar» que no es «más larga que en otros países».
En la misma postura de rechazo se encuentra el empresario textil Teddy Karagozian, conocido por promover el fin de las indemnizaciones a través de la «Mochila Argentina».