La brusca caída de la demanda interna y las exportaciones de vehículos cero kilómetro sigue golpeando fuertemente a la industria automotriz. Una nueva prueba de ello es la situación que atraviesa la empresa Lear Corporation, que suspendió a casi el 40% de los operarios de la planta que tiene en Belén de Escobar.
Lo que empezó a circular como un fuerte rumor a fines de febrero, fue confirmado al portal local El Día de Escobar. Debido al cese temporario de la producción del Grupo PSA (Peugeot – Citroën) en su planta de El Palomar -suspendió a mil empleados-, la autopartista estadounidense con sede en Colectora Este y avenida de los Inmigrantes debió parar hace algunas semanas el sector que proveía de asientos y fundas a la firma francesa.
“Casi todo el personal de la línea de PSA está suspendido hasta el 12 de abril. Son unas cincuenta personas. El resto está haciendo capacitaciones y pintando el piso del sector, entre otras tareas. La mano viene muy brava”, reveló el delegado gremial de la Asociación Obrera Textil (AOT), Antonio Zamprano.
En este marco, recalcó que los trabajadores cobrarán el 75% de su salario, más un 9% en concepto de prestaciones sociales, como el pago de la cobertura de salud.
Por el momento, la única línea de producción que sigue funcionando en la planta de Lear en Escobar -tiene otra en Pacheco y Córdoba-, donde trabajan cerca de 140 personas en turno matutino, es la que abastece de fundas para asientos a la fábrica de Fiat, en la provincia de Córdoba. Igualmente, el panorama a futuro no es para nada alentador.
“Estamos muy preocupados, porque no podemos producir para PSA y, por eso, a fin de mes seguramente haya despidos. En abril y mayo veremos qué pasa, pero no se ve nada bueno en el horizonte” adelantó Zamprano, asegurando que la política económica del gobierno nacional es la principal responsable de esta situación.