Con el gastronómico Luis Barrionuevo como promotor y anfitrión, la CGT almorzó con Roberto Lavagna. El economista es una alternativa que barajan en Azopardo ante la consulta frecuente de encuestas y la comprobación de que el Peronismo Federal no logra remontar en el electorado.
Además de Barrionuevo, estuvieron presentes Armando Cavalieri, Andrés Rodriguez, José Luis Lingeri, Gerardo Martinez, Omar Maturano y Roberto Fernández. Es decir, la mesa chica de la central obrera casi completa, sin los hermanos Héctor y Rodolfo Daer.
Los gremialistas menos propensos a cerrar con el kirchnerismo, ven con buenos ojos a Lavagna como un candidato que logre alinear a todo el espectro no k para competir en unas internas del año próximo.
Según precisó el Diario La Nación, los popes cegetistas entendieron que las señales del exministro indicaron que «quiere jugar» en 2019, por lo que prevén un nuevo encuentro, tal vez en la Uocra.
La idea, que se terminará de cocinar en las próximas semanas, es que Lavagna sea el candidato respaldado por la CGT que vaya a tallar en el espacio que hoy conforman sin entusiarmar al electorado el tigrense Sergio Massa, el rionegrino Miguel Angel Pichetto y el salteño Juan Manuel Urtubey