La CGT repudió el acto convocado en la Legislatura porteña por la candidata a vicepresidenta de La Libertad Avanza (LLA), Victoria Villarruel, en homenaje a las víctimas de grupos guerrilleros en los ’70, y la calificó como «integrante del sector de los personeros de la violencia».
La Secretaría de Derechos Humanos de la CGT, que lideran los judiciales Julio Piumato y Maia Volcovinsky, señalaron en un documento la necesidad de que «se adopten todas las medidas para evitar esas provocaciones, que niegan y falsean la verdad histórica y ofenden la memoria del pueblo», y condenó que ese espacio -junto con otros- procure «reinstalar ahora la teoría de los dos demonios y avanzar con el olvido y la negación».
«Esos sectores pretenden reinstalar ahora la teoría de los dos demonios y avanzar con las políticas del olvido y la negación como complemento necesario para profundizar el plan de saqueo y entrega de la Patria. A 40 años de democracia, renacen los cantos de sirena que pretenden aplicar políticas económicas ya fracasadas y responsables de haber frenado el modelo de desarrollo nacional que alcanzó la plena justicia social», puntualizaron.
El documento ratificó el reclamo realizado en todos los foros para que «se derogue la Ley de Entidades Financieras de (el exministro de Economía) José Martínez de Hoz, vigente desde la última dictadura militar, que cambió el paradigma de desarrollo del país y convirtió el ahorro de la sociedad en un botín de la codicia y el saqueo a manos de los bancos internacionales».
Piumato y Volcovinsky, de la Unión de Empleados de la Justicia de la Nación (UEJN), reseñaron que «el movimiento obrero organizado fue testigo y principal víctima durante décadas de la proscripción y las persecuciones, secuestros, torturas y desapariciones», y añadieron que «siempre resistió todo intento de atropello y avasallamiento de los derechos humanos y sociales en foros, calles, plazas y todas las instancias legislativas».
«También enfrentó a la dictadura militar y se opuso a todos los intentos -aun en democracia- que procuran el olvido y amnistía a los genocidas del Proceso. Acompañó la derogación del indulto y de las leyes del olvido para que sean juzgados los responsables de las atrocidades cometidas», concluyó la CGT.