La CGT afirmó hoy que «un Gobierno nacional electo democráticamente no puede considerarse una asociación ilícita», aseveró que «no hay una sola prueba material que relacione a Cristina Fernández de Kirchner» con el direccionamiento de la obra pública en Santa Cruz y sostuvo que «el show mediático montado para sustentar la acusación tiene por finalidad dañar la imagen de la ex Presidenta y de todo el peronismo».
«Un Gobierno nacional electo democráticamente no puede considerarse una asociación ilícita», dijo la central sindical en un comunicado firmado por su consejo directivo.
La CGT enfatizó que «rechaza la absurda calificación jurídica acusatoria impulsada por la fiscalía en contra de la ex Presidenta Cristina Fernández de Kirchner en ejercicio de un mandato constitucional».
«Los actos de gobierno a cargo de la máxima autoridad de la Nación realizados por el mandato popular no pueden constituir el vínculo que soporte un agravante para la calificación de una acusación sin sustento», afirmó la central sindical.
Y aseguró que «no hay una sola prueba material que relacione a Cristina Fernández de Kirchner con el direccionamiento amañado de la obra pública ni con ningún otro delito».
«El show mediático montado para sustentar la acusación tiene por finalidad dañar la imagen de la ex Presidenta y de todo el Peronismo. Esperamos que se haga justicia y los jueces desestimen la antojadiza acusación», completó.