Mientras se realizaba la convocatoria de la Pastoral social en Mar del plata que se llevaba todas las miradas de la prensa con Moyano, Barrionuevo y Caló sentados en primera fila, en otro punto de esa ciudad los integrantes de la “Mesa de los 100” deliberaban y realizaban su «Contracumbre».
En el hotel del Sindicato de Obreros Marítimos Unidos (SOMU) lo dirigentes gremiales junto con un grupo nutrido de empresarios acordaron una declaración con definiciones que abarcan desde los fondos buitre al acuerdo social para consolidar el modelo productivo y el desarrollo nacional.
Entre quienes participaron de se distinguía al propio Antonio Caló (UOM), Horacio Ghilini (Sadop), Hernán Escudero (Juventud Sindical), Gerardo Venutolo (Adimra), Pablo Challú (Uipba), Raúl Lamacchia (Feba) Marcelo Fernández (Cge) y Bruno Capra (Ceen), Juan Palacios (Aatrac), Leonardo Felman (Cea), Víctor Lamas (SEOFFRA), Raúl Quiñones (Tabaco), Carlos Ortega (Secasfpi) y Daniel Di Bártolo (Sadop) junto a dirigentes de Pescadores y del Somu Mar del Plata.
Como contó ayer Info Gremiales, en el encuentro se sostuvo que la unidad sindical sólo es posible detrás de un proyecto de desarrollo que esté sustentado en una alianza estratégica con el empresariado nacional y que hoy por hoy se encuentra lejos de consolidarse.
Hubo voces que alertaron sobre el encandilamiento que ejerce el endeudamiento externo sobre “buena parte” de sectores políticos. En esa línea, se destacó que los golpistas son los que hacen los ataques financieros ya que hoy no pueden golpear a las puertas de los cuarteles.
Los participantes de las deliberaciones celebraron la agenda social y económica del Papa Francisco. En ese contexto, pronunciaron que la unidad sindical es una situación que no puede ser resuelta por medios de comunicación hegemónicos ni por jerarquías eclesiásticas, es potestad de los trabajadores y son ellos quienes la definirán y en qué condiciones.
La unidad del movimiento obrero es concebida dentro de un proyecto nacional y en alianza con el empresariado comprometido con ese proyecto. Se trata de que el capital nacional y el movimiento obrero organizado se constituyan en un polo de poder capaz de mantener el rumbo actual. Esa elección incluyó la necesidad de discutir el modelo de industrialización. “La unidad no se puede buscar desde el amontonamiento sino de un proyecto político como dice Cristina”, sostuvo uno de los participantes.
Del encuentro quedó una definición que tiene densidad de estrategia política: “Esto es lo más cercano al peronismo. ¿Qué estamos esperando para defenderlo? Somos Compañeros de destino no de camino.”
Declaración de la mesa de los 100
Consolidación de la alianza estratétgica entre los sectores del trabajo y la producción.
1. Manifestamos nuestro apoyo a la política de normalización en las relaciones con el sector financiero internacional llevada a cabo por el Gobierno Nacional en la solución de los casos Repsol y Club de París, y continuada con la intención de honrar el 100% de la deuda externa en condiciones justas, equitativas y viables. La dignidad nacional es el límite.
2. Esta normalización puede brindar beneficios a nuestro país en el área de las inversiones en infraestructura económica y social a fin de consolidar el modelo de fomento a la producción, al desarrollo de las empresas nacionales, al pleno empleo, a la distribución del ingreso y a la inclusión social.
3. Alertamos sobre la actuación de grupos de interés que intentan que en el país vuelva a generarse un ciclo de alto endeudamiento externo y una economía que no responda a los intereses nacionales y que esté basada en la especulación financiera. Esperamos que nuestra clase política deseche estos caminos que, en principio parecen fáciles y accesibles, pero que terminan generando inevitablemente crisis económicas y sociales.
4. Al mismo tiempo, repudiamos el fallo del juez Griesa sesgado a los intereses de los especuladores financieros y de la actuación de los fondos buitre. Su decisión implica un desprecio extraordinario a la realidad de las relaciones económicas y financieras internacionales. La conducta de los fondos buitre representa lo peor y más bajo de la especulación financiera, lo que hace más incomprensible el fallo del juez Griesa. Esperamos que la comunidad internacional continúe repudiando estas actuaciones e instrumente medidas para contribuir a la solución de este problema.
5. Reivindicamos el acuerdo social como un instrumento imprescindible para el ordenamiento de la coyuntura y la elaboración de políticas de Estado que consoliden el modelo productivo y el desarrollo nacional.