Un comunicado del espacio que lidera el dirigente bancario Sergio Palazzo e integran, entre otros, los gremios de televisión, lecheros, molineros, farmacia, docentes privados, judiciales porteños y pilotos de líneas aéreas, rechazó la posibilidad de que el consejo directivo levante o suspenda en su encuentro de mañana esa movilización, luego de que los grandes sindicatos de servicios (‘los gordos’) así lo decidieran anoche en un encuentro reservado de sus representantes.
«Las condiciones por las que la movilización fue decidida no variaron. La política económica del gobierno continúa empeorando la situación de los trabajadores. Además, la decisión explícita de imponer una reforma laboral, previsional y tributaria regresiva sobre los derechos de trabajadores y sectores más vulnerables de la sociedad representa una amenaza insoslayable», puntualizó.
La Corriente Federal también exigió a la conducción cegetista que respete «la convocatoria al Comité Central Confederal (CCC) del 23 de agosto para determinar la fecha de una huelga nacional y un subsiguiente plan de acción en demanda de cambios en la estrategia económica, la aplicación de una emergencia socio-laboral; la adopción de medidas de protección de la industria nacional y el absoluto cumplimiento de la legislación laboral vigente», afirmó.
Palazzo, jefe de la CFT y de la Asociación Bancaria (AB), había señalado que levantar o suspender esa movilización sería «un mamarracho» y «un hecho insólito», además de violar «el unánime mandato del plenario de secretarios generales de julio».