Una encuesta privada entre firmas de todo el país arrojó datos alarmantes en cuanto a la prolongación del trance económico que atraviesan las pymes, pese a las proyecciones del Gobierno. Creen que podrían bajar las persianas 10 mil en el segundo semestre.
Las pymes no logran salir a flote en el océano de la recesión y desde el sector advierten que la crisis podría extenderse en forma de «L» durante el segundo semestre de 2024.
Así se desprende de una encuesta realizada por Empresarios Nacionales para el Desarrollo Argentino (ENAC) que contó con la participación de 350 empresas de 21 provincias y que lleva el título «Crisis en las pymes: La recesión en «L» se extiende al segundo semestre». Vale destacar que la Confederación Argentina de la Mediana Empresa (CAME) ya había advertido que las ventas minoristas cayeron 15,7% interanual en julio y 1,7% comparado con junio.
«Si la recesión económica que ya se extiende al segundo semestre, se mantiene en estos niveles de actividad deprimidos, el escenario más probable es que se pierdan otras 10.000 pymes más hasta fin de año. Esto parece ser un costo demasiado alto en virtud del beneficio de reducir la inflación a niveles de septiembre del 2023, donde la interanual fue del 138% según el INDEC. Una Ley de Emergencia PYME se torna vital para mitigar el daño que la recesión le aflige al aparato productivo nacional», subrayaron desde ENAC.
En tal sentido, el relevamiento arrojó que solo el sector servicios mantiene un nivel de venta «razonable» mientras que todos los demás se encuentran en una recesión que «lleva para el comercio 6 meses y para la industria y la construcción 9 meses».
Respecto de las expectativas empresariales, un 65,35% considera que la situación económica nacional empeorará en 2024.
Respecto del panorama de actividad, «Un 51,2% de las empresas tienen caídas de ventas significativas en el segundo trimestre del 2024, continúa la tendencia del primer trimestre y arrastra una crisis consolidada hacia el segundo semestre. En términos sectoriales, las empresas industriales con ventas razonables cayeron un -41,2%, las comerciales un -33,2% y las de servicios un -26,45% respecto del segundo trimestre del 2023», destaca el informe.
A la hora de evaluar el comportamiento de las industrias en particular, solo el 36% de las compañías trabajo de forma normal. «La capacidad industrial utilizada promedio está en 50,3%, lo que representa un incremento del 0,3% respecto del primer trimestre del 2024 marcado un nivel de estancamiento del sector. Hay un 6% de industrias que están en situación crítica pasible de cierre», subraya el análisis.
Por otra parte, solo un tercio de los participantes tuvo rentabilidad positiva en el segundo trimestre del año mientras que en los tres meses anteriores había alcanzado el 60,7%. «Si tenemos en cuenta que un 34,09% manifestó que tuvo pérdidas en segundo trimestre del 2024, son más las empresas en situación negativa que positiva, configurando una alerta roja que de no revertirse puede llevar al riesgo patrimonial, o a la reducción de costos operativos en las pymes o en su defecto al cierre generalizado de empresas», alertaron los autores del texto.
Por último, el 21% de las firmas relevadas redujo personal y sólo un 13% incorporó, hilvanando tres trimestres consecutivos con más despidos que contrataciones en el universo pyme, fuertemente impactado por la devaluación y el posterior fogonazo inflacionario.