La CTA Autónoma rechazó la instalación de un radar de la empresa británica LeoLabs en Tierra del Fuego por considerarlo un «acto lesivo» contra la «soberanía» y la «defensa del territorio argentino» y respaldó la nota enviada por el Ministerio de Defensa a la Jefatura de Gabinete para pedir la cancelación y suspensión definitiva de su puesta en funcionamiento de esa iniciativa.
«La CTA-A expresa su preocupación ante la posible instalación de un radar bajo operación británica en la provincia de Tierra del Fuego. Se trata de un acto lesivo contra nuestra soberanía en materia territorial espacial, digital, tecnológica y comunicacional», sostuvo la central obrera en un comunicado.
Para la central sindical, la instalación de la Estación Satelital AGSR que pretende realizar la empresa LeoLabs Argentina SRL -con domicilio legal en Gran Bretaña- en la localidad fueguina de Tolhuin tiene el propósito de «monitorear la actividad satelital argentina tanto civil como militar, hacer seguimiento de trayectorias y lanzamiento de vectores e interceptar datos, comunicaciones y observar objetivos en tierra, mar y aire».
«Esto supone una gravísima intromisión por parte de un actor privado en áreas vitales; para la soberanía y la defensa del territorio argentino», se consideró en el comunicado firmado por el secretario general de la central, Hugo «Cachorro» Godoy, y el secretario de Relaciones Internacionales, Adolfo Aguirre.
Además, se objetó que la operación «sería realizada por una empresa radicada en Gran Bretaña», que, se dijo, se trata de un «Estado que usurpa el territorio» de las Islas Malvinas, Sandwich y Georgias del Sur.
La CTA-A denunció que las Islas Malvinas fueron convertidas por el Reino Unido en «una base militar nuclear de la OTAN» y se criticó que «mantiene una actitud hostil a todo desarrollo del complejo industrial, tecnológico y de defensa que perciba como un desafío a su intromisión en el Atlántico Sur».
«Esta estación serviría para extender la capacidad de proyección de la influencia británica sobre el Hemisferio Sur, haciendo de nuestro país una pieza involuntaria en las ambiciones y disputas de las grandes potencias», se alertó.
La CTA-A respaldó la nota que el martes pasado el ministro de Defensa, Jorge Taiana, envió a la Jefatura de Gabinete para solicitar «la cancelación y suspensión definitiva a la instalación y puesta en funcionamiento» de la Estación AGSR de LeoLabs Argentina SRL.
En el pedido Taiana realizó la petición al considerar que el proyecto «vulnera la seguridad nacional» y por «ser incompatible con la Directiva de Política de Defensa Nacional (DPDN)».
«La postura de que ‘soberanía y defensa nacional son conceptos inseparables de la actividad espacial’ es correcta», elogió la central de trabajadores sobre la misiva.
Y concluyó: «Hechos como este no pueden tomarse a la ligera, La CTA considera que detener esta acción es fundamental para promover una visión estratégica de desarrollo con soberanía tecnológica, industrial, satelital y de datos».
Otro de los sectores que se manifestó en contra de la instalación del radar fue el partido Unidad Popular (UP), que exigió que «se cancele inmediatamente la operación del radar británico en Tierra del Fuego» y también respaldó «la declaración del Ministro de Defensa».
En un comunicado del partido que firmó su presidente Claudio Lozano, se consideró que la instalación de la Estación Satelital AGRS «es una clara violación de nuestra soberanía e integridad territorial».