Hace pocos días la sala 9 de la Cámara Nacional del Trabajo ordenó la reinstalación de los 9 trabajadores despedidos por la firma Mantovana S.A. que trabajan para el Ministerio de Relaciones Exteriores. El fallo ordenó que los empleados vuelvan al mismo lugar y ocupen la misma función.
Desde entonces la empresa no cumple el fallo de la justicia y la Cancillería, a cargo de Susana Malcorra, mira para otro lado.
En el Ministerio de Relaciones Exteriores se desarrolla, desde Noviembre, un grave conflicto con trabajadores tercerizados de limpieza. La situación se disparó ante el cambio de empresa por lo que, en aquel momento, iban a quedar 47 trabajadores despedidos. La solidaridad del resto de los más de 150 compañeros lo impidió.
Inmediatamente se desencadenó otro conflicto: según la licitación pública todos los empleados debían trabajar 8 horas diarias y había más de 20 a quienes se les habían otorgado tan solo 4 horas. Además la empresa Mantovana S.A. despidió a 15 trabajadores al mes de firmar su contrato.
Luego de paros y repudios y una mediación de la propia Cancillería el conflicto se superó, pero la empresa como represalia despidió a todos los delegados y representantes del sindicato Sitmma (maestranza) nueve en total que ahora la justicia devuelve a sus empleos.
Desde la CTA Capital apuntan ahora contra Malcorra por no hacer cumplir la ley en el Ministerio y permitir que la tercerizada desconozca lo dictado por el juez.