La CTA desmiente a Milei y asegura que las paritarias pierden contra la inflación: el salario real cayó hasta un 7% en el primer trimestre

Un informe de la CTA Autónoma desmiente los dichos del presidente Javier Milei y muestra que la mayoría de los gremios sufrió una pérdida de poder adquisitivo entre enero y marzo. El personal doméstico y los judiciales, los más perjudicados.

A contramano del discurso repetido del presidente Javier Milei, quien afirmó que “los salarios le están ganando a la inflación”, un informe del Instituto de Estudios y Formación de la CTA Autónoma, elaborado en base a datos oficiales, sostiene que las paritarias perdieron hasta casi un 7% frente al alza de precios en el primer trimestre de 2025. La caída del salario real afecta a la mayoría de los sectores, con la excepción de apenas dos convenios que lograron empatar o superar la inflación.

El estudio destaca que los sectores más golpeados fueron el personal de casas particulares, con una caída del 6,8%, y los empleados judiciales nacionales, con una pérdida del 6,2%. Ambos gremios atraviesan actualmente conflictos abiertos, con medidas de fuerza y reclamos por recomposición. En el caso del personal doméstico, la paritaria es gestionada de forma especial, con participación del Estado y sin representación patronal directa, lo que complica las actualizaciones.

En un segundo escalón se ubican otros sectores como textiles, Sanidad, Alimentación, administración pública nacional y metalúrgicos, con caídas entre el 3,9% y el 4,6%. También perdieron poder adquisitivo sindicatos de gran peso como Empleados de Comercio (-3,1%), Camioneros (-1,9%) y Construcción (-1,6%).

Uno de los testimonios más llamativos fue el de Armando Cavalieri, secretario general del sindicato mercantil, tradicionalmente moderado y con buena sintonía con el Gobierno. En declaraciones a Clarín, el dirigente apuntó con dureza contra la política oficial de control salarial: “Los delegados nuestros en los supermercados nos informan de remarcaciones diarias. Los precios están dolarizados y los salarios están en pesos argentinos. Tengo 50 años de paritarias, sé lo que es acordar. Pero ahora el Gobierno pone el precio del salario. La gente gana poco porque el Gobierno fija el salario. No hay libertad”.

La política salarial del Ejecutivo, comandada por el ministro de Economía Luis Caputo y el secretario de Trabajo Julio Cordero, consiste en poner un tope de entre el 1% y el 1,5% a los aumentos mensuales, estrategia que quedó desfasada ante la evolución del Índice de Precios al Consumidor, que en marzo fue del 3,7%. Con convenios demorados o no homologados a la espera del aval de Hacienda, los sindicatos denuncian que se está ejerciendo una presión directa para evitar acuerdos por encima del “techo”.

Mientras tanto, la pérdida del poder adquisitivo se consolida como uno de los principales factores de tensión en el mundo del trabajo, en un escenario marcado por la alta inflación, la caída del consumo y la creciente conflictividad gremial.