La inflación de los trabajadores, que mide el Instituto Estadístico de los Trabajadores (IET), saltó en junio al 3,5% contra mayo (la mayor suba mensual en dos años) y al 29,5% interanual.
El centro de estudios de la UMET, del que participan más de 50 gremios confederados en la CGT y en la CTA de los Trabajadores, destacó el fuerte impacto de la suba de precios en el salario real, que cayó 4% interanual.
La inflación mensual de los trabajadores fue la más alta desde mayo de 2016, cuando alcanzó 3,7%. Asimismo, la interanual se disparó a los niveles de comienzos del año pasado.
El rubro “alimentos”, que impacta con más fuerza en los hogares de menores recursos, trepó en junio al 4,1% y fue la más intensa desde diciembre de 2015.
El resultado es una fuerte caída de 4% en el poder adquisitivo respecto de junio de 2017. Así, el salario real durante el mes pasado fue 9,1% menor al de noviembre de 2015 (punta a punta), antes del cambio de Gobierno, y en promedio fue 5,2% más bajo durante ese período. Además fue 6,3% inferior al de enero de este año.
Considerada por deciles, la inflación de los trabajadores sigue siendo más intensa en los sectores “de bajos ingresos relativos, que destinan un porcentaje mayor de los mismos a servicios públicos y alimentos”.