El presidente Javier Milei anunció este lunes en un noticiero de la mañana que despidió al secretario de Trabajo, Omar Yasín. Si bien lo responsabilizó del aumento de sueldo de él mismo y sus funcionarios, de fondo hay un debate respecto de quien controla la secretaría de Trabajo. Mauricio Macri Vs. Patricia Bullrich. Jorge Triaca como principal operador.
El presidente Javier Milei echó hoy a al secretario de Trabajo, Omar Yasín, luego de la polémica generada el fin de semana por los salarios del Gabinete y del propio jefe de Estado. La decisión fue comunicada durante un reportaje concedido al periodista Antonio Laje en LN+.
«Lo he despedido. Fue un error que no debió haber sucedido. Lo están notificando en este momento», aseguró el jefe de Estado y luego se justificó a sí mismo y a sus bloques en el Parlamento por ser «outsiders» de la política.
La determinación sorprendió a los ajenos pero ya se rumoreaba hace días en los pasillos de la Secretaría de Trabajo. Es que subterráneamente se desarrolla una interna, en espejo a la interna del PRO, que enfrenta a Mauricio Macri con Patricia Bullrich.
Yasín había quedado en el centro de la escena en las últimas semanas, mucho antes del aumento de sueldo del propio Milei en el que no tuvo nada que ver. De hecho el decreto 206/24 en cuestión lleva las firmas del propio Milei, del jefe de Gabinete Nicolás Posse y de la ministra de Capital Humano, Sandra Pettovello. La salida de Yasin encubre a los tres.
Justamente lo que hubo fue un cuestionamiento respecto del rol de su gabinete y sus funcionarios, como presentó en exclusiva InfoGremiales, del uso de autos oficiales de la estructura estatal y del manejo de los trámites ministeriales. Eso lo llevó a tener un reto abierto de la ministro Pettovello, de quien dependía hasta hoy.
La inestabilidad de Yasin, a quien señalan integrante del ala bullrichista, estuvo apuntalado por operaciones internas que motorizó Jorge Triaca. El ex ministro consiguió el ingreso de una ola de funcionarios y busca quedarse con el control total de la Secretaría, todo en el macro de la discusión dentro del PRO entre Macri y Bullrich.
De perfil bajo en el plano público, pero muy activo en reuniones de rosca incluso con gremialistas, Triaca viene gestando la «toma» de Trabajo para el macrismo. Algo que ahora queda a un zarpazo. Aunque también la jugada a un pleno podría salir pésima.
La hiperactividad del ex ministro de Macri fue vista con preocupación en las últimas horas por varios observadores del mundo sindical. Si bien no tenían relación virtuosa con Yasin, que había dejado sus decisiones a manos del ministro de Economía Luis Caputo, tienen fresco el pasado de Triaca en la cartera.
De hecho recuerdan la andanada de intervenciones gremiales que motorizó, los niveles de corrupción que se comprobaron en esas mismas estructuras cuando logró tomar el control y la escalada contra aquellos que se oponían en un contexto en el que ahora la confrontación entre el Ejecutivo y el sindicalismo es todavía más fuerte.
Varios recuerdan, también, que funcionarios de esa cartera promovían el terror vaticinando acciones judiciales contra sindicalistas que luego se corroboraban en caso de no cambiar la actitud.