Tres empresas de colectivos de corta distancia que operan en el Área Metropolitana de Buenos Aires deberán contratar un 30% de choferes mujeres tras un fallo de la Justicia según el cual hubo “discriminación de género” en la selección de personal para ese puesto laboral.
Las compañías fueron demandadas por Érica Borda, colectivera despedida a la que no volvieron a contratar, a través de un recurso de amparo. La Defensoría General de la Nación brindó patrocinio jurídico en el reclamo individual y también en una acción colectiva para poner en cuestión la «discriminación estructural en el acceso al empleo por motivos de género».
La sentencia dictada por la Sala II de la Cámara Nacional de Apelaciones del Trabajo también estableció una «reglamentación específica para compensar las ilegítimas desigualdades» en ese ámbito.
Fue demandado además el Ministerio de Producción y Trabajo en su calidad de autoridad de aplicación “para que adopte las medidas necesarias para hacer cesar las prácticas discriminatorias que afectan a las mujeres en el acceso al trabajo en el sector”.
A partir de la medida judicial, la Comisión Tripartita de Igualdad de Trato y Oportunidades entre Varones y Mujeres en el Mundo Laboral (CTIO) elaborará un listado de mujeres con licencia habilitante que hayan expresado por nota su voluntad de ser contratadas.
Las empresas denunciadas deberán remitirse a esta Comisión al momento de contratar personal hasta alcanzar el cupo fijado del 30%. Érica será la primera aspirante en la lista.