La tradicional fábrica metalúrgica EMEPA, de Chascomús, le comunicó a sus 180 trabajadores que encarará un fuerte recorte de personal. En el corto plazo dejará en la calle a unos 100 operarios, el resto permanecerá pero sólo por unos meses.
Según publicó el portal InfoCielo, la fábrica venía sobreviviendo gracias a un contrato de reparación de vagones otorgado por el Ministerio de Transporte, que debía renovarse y finalmente no se logró.
La crisis económica viene pegando fuerte en el distrito: a mediados de abril, la firma Unitec Blue, perteneciente al empresario Eduardo Eurnekian, dejó en la calle a 70 trabajadores y se encaminó a su cierre definitivo. También la firma Texes cerró sus puertas, despidiendo a 130 trabajadores.
Como en el caso de UNITEC, en EMEPA, la UOM -gremio que agrupa a los operarios- tuvo un rol muy cercano al interés empresarial, limitándose a garantizar el cobro del 100 por ciento de las indemnizaciones.
Por ahora, los trabajadores permanecen en estado de asamblea permanente a la espera de la confirmación de las noticias.